Acompáñenos en un tiempo de ayuno y oración, apartándonos para buscar a Dios con renovada pasión y propósito. En una época donde el discernimiento espiritual, la fortaleza y la entrega son más necesarios que nunca, invitamos a toda la familia de nuestra iglesia a participar en esta semana de profunda intercesión y reflexión.
Como congregación, mantengámonos firmes, revestidos con la armadura de Dios, y alcemos nuestras voces en unidad por:
1. Santidad personal: Para que nuestras vidas reflejen el carácter de Dios y estén completamente entregadas a Él.
2. El próximo capítulo del León de Judá: Al mirar hacia el futuro, oremos por claridad, visión y obediencia a la dirección de Dios para nuestra iglesia.
3. Una mayor manifestación del Espíritu Santo: Por un derramamiento renovado, dones espirituales y valentía para caminar en poder y amor.
4. Sanidad: Restauración física, emocional y mental en la vida de las personas y las familias. 5. Avivamiento en Boston – Que Dios llene cada iglesia de almas no salvas que anhelan la verdad y de creyentes que arden en el Espíritu Santo.
Unámonos, humildemente ante el Señor y creamos en la transformación, tanto personal como comunitaria. Que esta sea una semana que transforme las atmósferas y encienda los corazones para la gloria de Dios.