Una vida digna del Señor

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Colosenses 1 comenzando con el versículo 9 al 14. Mientras buscamos ese texto si fuéramos a tomar una encuesta esta mañana y le pregunto: ¿por qué llegaste a la Iglesia esta mañana, por qué llegaste a este culto? Bueno Pastor porque el culto de las 9 me conviene, así puedo llegar al trabajo, almorzar o tal vez ustedes tienen razones más sublimes; Pastor: estoy enfermo y quiero que el Señor me sane, o Pastor: tengo un problemita legal y necesito que el Señor me ilumine o que el Señor me revele cómo navegar la ola. Pastor: mi hogar está pasando por una crisis y quiero que el Señor intervenga. Estas son razones.

Si usted ha llegado con esas razones, son válidas, bienvenidos. Pero muchos otros tal vez contestarían de esta manera: Pastor, estoy aquí porque quiero que Dios cambie mi vida. Quiero cambiar mi vida. Y francamente mis hermanos, en estos días de consolidación creo que podemos hablar con mucha autoridad que ese es el deseo de nuestro corazón, de que esta Congregación se llene de gente que vengan con ese deseo a la Casa de Dios.

Pastor: quiero cambiar mi vida, sé que, no estoy seguro qué es lo que tiene Dios para mí pero sé que tiene que ser algo distinto a lo que yo he estado viviendo, y yo digo: gloria a Dios. Quiero cambiar mi vida; bien. Entonces mi pregunta sería: cambiarla ¿para qué, o en qué, o hacia qué? Y esta mañana esta Palabra se dirige a ese deseo, a usted que ha llegado con ese deseo y le sugiero esto: si quieres cambiar tu vida cámbiala por una vida que se asemeje a la vida que Dios intentó que vivieras cuando Él te creó, una vida digna del Señor. El Señor que te creó, el Señor que te entregó esa vida, el que te rescató para que la vivieras en victoria.

Este texto nos provee mis hermanos un esquema de una vida que vale la pena vivir, ¿a qué se parece esta vida digna del Señor? Versículo 9: "Por lo cual también nosotros desde el día" a propósito: Padre, Señor te bendigo, te bendigo. Señor: declaro que Tu Presencia es tan dulce y tan obvia, tan manifiesta. Ahora Señor vivifica esta Palabra con la misma frescura con la que me la entregaste, Señor que así los corazones la reciban y que haga cambios, en el Nombre de Jesús.

"Por lo cual nosotros desde el día que lo oímos no cesamos de orar por vosotros y de pedir que seáis llenos del conocimiento de Su Voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual, para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra y creciendo en el conocimiento de Dios, fortalecidos con todo poder conforme a la potencia de Su gloria para toda paciencia y longanimidad, con gozo, dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de los santos en luz."

Y mis hermanos me detengo en los versículos 13 y 14 porque para entender, para nosotros entender por qué vale la pena vivir una vida digna del Señor primero tenemos que entender lo que Cristo hizo por nosotros. En el versículo 13 y 14 nos encapsula un milagro gigantesco, la razón por la que nosotros estamos aquí y por qué podemos esperar vivir una vida digna del Señor.

El versículo 13 declara que Él, el Señor: "Nos ha librado de la potestad de las tinieblas y trasladado al Reino de Su amado Hijo en quien tenemos redención por Su sangre, el perdón de pecados. El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas." Aquí hay una verdad mis hermanos que si no la captamos nada de lo demás de este pasaje tendrá sentido.

Esta vida digna del Señor no sería posible, sería mas bien imposible sin la obra redentora que hizo Jesús por nosotros, el cual nos ha librado dice ahí; en otras palabras nos ha rescatado de la potestad de las tinieblas. Algunas versiones bíblicas traducen esa palabra "potestad" en: dominio de las tinieblas. O sea, no es meramente un poder vago, están hablando como de un reino o un estado. Son unas tinieblas organizadas, estructuradas bajo el mando de aquél quien la Escritura llama "el príncipe de este mundo" que el Señor lo reprenda. Es un estado organizado.

Imagínense mis hermanos un laberinto oscuro tanto vertical como horizontal y éramos rehenes de ese dominio. Estábamos perdidos en ese laberinto de tinieblas. Dentro de este laberinto uno se puede mover de un nivel de tinieblas a otro aún, tal vez un poco menos opresivo pero no te das cuenta que todavía estás en tinieblas; ¿conoce gente así? Te mejoras un poco, las cosas te van tal vez un poco mejor, asistes a una conferencia o tal vez oyes un mensaje y tal vez de mueves pero lo opresivo de este lugar es que uno no puede escaparse de este lugar por nuestra propia cuenta a menos que alguien nos rescate, a menos que alguien entre como hizo Jesús.

Dice que el Señor nos libró. La palabra allí es "nos agarró." Imagínese al Señor extendiendo Su Mano y agarrándote por el cuello o por el moño como dice el profeta Zacarías: "Como tizón sacado de entre las llamas, el Señor extendió Su Mano y te agarró, te libró de ese lugar y nos trasladó." La palabra que usan aquí es la palabra que usaban cuando te daban un pasaporte para entrar en otro país.

En otras palabras, nos entregó los papeles de una realidad totalmente distinta. Nos trasladó los papeles al Reino de Su Hijo amado. Claro, muchacho. Yo conozco algunas iglesias que al oír eso, my goodness. El Señor nos rescató del infierno a través de la redención de Su sangre preciosa, redención. En otras palabras Él pagó el precio a través de Su sangre, pagando una deuda del pecado, el pecado que nos separaba de nuestro Dios, nos separaba de Su Gracia, nos separaba de Su luz, nos separaba de Su Voluntad, nos separaba de la vida, de la fuente de vida.

Él pagó el precio dándole valor, esto es lo que quiere decir redención, dándole valor a algo que no valía nada. That's what He did. Y por eso ahora estamos en este Reino de luz, por eso usted puede aún oír esta Palabra porque el Señor nos rescató del dominio de las tinieblas ¿para qué? para que vivamos una vida digna del Señor. Gloria a Dios.

Pastor: esto se oye muy bien ¿cómo es esto Pastor? dígame ahora ¿cómo es esto, qué es esta vida digna del Señor? Volvamos al pasaje del versículo 9. ¿Sabe? ninguno llega al Reino de Dios conociendo instintivamente cómo vivir una vida digna del Señor, no se preocupe.

Cuando el apóstol Pablo se enteró que el Señor estaba haciendo esta obra redentora entre los Colosenses él elevó esta oración y mis hermanos, deberíamos también elevar unos por otros esta oración, ore esto por usted y por los hermanos de esta Congregación; yo creo que sería la oración más noble que usted puede ofrecer al Señor, nosotros podemos ofrecer al Señor unos por otros: que seamos ¿qué? "Llenos del conocimiento de Su Voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual."

Bienvenido al Reino de Dios y ¿sabes qué? todos somos nuevos al Reino de Dios. No sabemos vivir una vida digna del Señor, llegamos con nuestras malas mañas al Reino de Dios. Yo lo comparo a rescatar a Tarzán de la selva y lo sientan en la mesa y lo tiene que entrenar a usar cuchara y cuchillo, y qué se hace en la mesa y qué no se hace en la mesa. Algo así nosotros llegamos al Reino de Dios, totalmente no preparados, nacidos de nuevo. Y llegamos con nuestras malas mañas, con los hábitos que adquirimos navegando el dominio de las tinieblas.

Las cosas que usabas en el dominio de las tinieblas eso usas aquí en el principio. El problema es éste: tal vez en ese dominio era necesario mentir y estafar, y engañar para poder salir con la tuya pero descubres dentro de poco que eso no funciona en el Reino de la luz. Tal vez acá llegaste con un carácter iracundo, una piel demasiado tierna, te ofendes fácil, ofendes a otros con demasiada irregularidad; también aprendes que eso no funciona en el Reino de la luz y que tienes que cambiar.

Oremos nosotros que seamos llenos, llenos del conocimiento de Su Voluntad. O sea, del conocimiento de la Voluntad de Dios para nosotros, el patrón de vida que Dios quiere que adoptemos ahora como parte de Su Reino reflejando sobre Él, no se quede meramente en nuestras emociones, no se quede meramente en nuestros corazoncitos; no se quede meramente en las lágrimas que brotamos cuando al principio el Evangelio llega a nosotros.

Queremos ser llenos del conocimiento de la Voluntad de Dios. Queremos que esta Voluntad penetre nuestra mente y que cambie nuestra cablería, nuestra manera de pensar y aún nuestra manera de soñar o de planificar, o envisionar. Una de las cosas que me encantó a propósito de la conferencia de matrimonio que tuvimos hace semanas atrás es una conferencia que tuvieron acerca de cómo la mente es capaz de cambiar. Dios nos dió un cerebro plástico, maleable. No digas: así me hizo el Señor, no puedo cambiar porque el Señor no te hizo así primeramente y dos: sí puedes cambiar.

Y ora para que el Señor te llene del conocimiento de Su Voluntad, y que esto llegue aún a los recintos inconscientes de tu mente y tu cerebro. Y esto no es magia. Para poder hacer esta obra y yo sé que es difícil, y es duro, y será lo más arduo que vas a hacer en tu vida, pero esto requiere las herramientas de Dios, todas las herramientas de Dios. Como dice aquí: "Toda sabiduría e inteligencia espiritual."

Espiritual porque Dios se convierte en nuestro entrenador, en nuestro couch. Nos sometemos a Su sistema y Él nos dará Su inteligencia, inteligencia. Nuestra capacidad de manejar datos, nuestra capacidad de manejar información; un sermón que usted oye, la clase de discipulado o tal vez lo que lees en la Palabra, que esto no sea meramente información pero el Señor lo convierta en inteligencia y sabiduría que es otra cosa todavía.

Sabiduría mis hermanos se adquiere por dura experiencia bajando nuestros rostros y sometiéndonos al trato de Dios, viendo aún nuestras luchas, nuestros quebrantos y sinsabores como una oportunidad para indagar ¿qué me estará mostrando Dios acerca de Su Voluntad? ¿qué me muestra el Señor acerca de Su visión para mí?

Y a la larga la Voluntad del Señor para nosotros es esta: "Que andéis agradándole en todo." La versión Reina Valera traduce el griego de una forma literal, andéis, la palabra prelepatesae quiere decir literalmente esto: que caminemos la Tierra y que nuestra vivencia sea digna del Señor; no solamente nuestras palabras o ideas pero aún como nosotros caminemos sea digno del Señor.

Mis hermanos entonces ¿cómo es eso? se puede reducir a esto, agradándole, complaciéndole. Aquí la imagen en el griego clásico es muy humillante, es más, en el griego no escritural, en el griego clásico era un insulto esta palabra. Indicaba una persona que se pasaba de servil. Un siervo, una persona tan servil que no se conforma con esperar que su amo lo mande pero anticipa los deseos y los gustos de su patrón y su amo. En inglés se llamaba un brown-nose, en mi vecindario se llamaba un lambe ojo.

Había una mesera, a propósito, mi favorita en sello, cuando leí esta Palabra pensé en ella, yo entraba a este lugar, un restaurante de sushi. Al yo entrar ya tenía mi té preparado, no era parte de la costumbre del lugar, ella siempre sabía que yo siempre pedía eso. Me sentaba, abría el menú y ella hasta me asustaba a veces; let me see, you want bento box with samen or chicken? you feel like samen today don't you? Chery: how do you do that? ¿cómo haces eso? pero anticipaba de antemano mis deseos y sí ¿a quién no le gusta eso? y a Dios más.

Mis hermanos, piensen esto, tomen un momento y piensen en lo maravilloso que es esto. El Señor nos ha hecho, es posible que nuestras vidas puedan agradar o complacer a Dios ¿no te maravilla eso? que Él toma placer, se agrada de nosotros. Es más por eso Él te creó, Él nos ha creado para darle placer a Él, we were created for His pleasure; Él nos hizo, nos creó porque le dió placer a Él crearnos.

¿Quiere vivir una vida digna del Señor mi hermano, una vida que valga la pena? le pregunto esto. ¿Cuál es su mayor preocupación en la vida, cuál es su mayor preocupación? ¿que se den cuenta de mí? ¿que me asciendan en mi profesión? ¿que esté rodeado de familia y amigos? ¿que me pueda retirar cómodamente y que me llamen "usted"? por lo cual usted se preocupe, sus metas en su vida es lo que su vida será.

Yo sugiero esto. Si quieres encontrar el secreto de todo gozo, de una vida y saludable cambie su preocupación por esta: Señor, te quiero complacer. Señor quiero que mi vida te agrade, pasando tu vida preguntándote: ¿te complace mi vida Señor? permítame en inglés un momentito porque esto es más mi diálogo con el Señor. God does my life please You, does it please You? God at the end of the day that this day pleases You. God whatever I came through today, Father did that give You pleasure? when You look at my heart does it give You pleasure, does my life please You?

Señor: al mirar mi corazón, al leer mi vida, al leer mis pensamientos, al mirar los pasos que tomo ¿te da placer mi vida? haga eso su preocupación. Haga eso su meta. Si es así dentro de poco su vida debe tomar estas características de una vida que complace a Dios, una vida digna del Señor; primeramente llevando fruto en toda buena obra.

Si usted se dedica a vivir una vida digna del Señor, una vida que complace al Señor usted verá que el Señor no creó ni una sola alma incapaz de llevársela. Encerrada en ti hay una semilla de fruto que Dios enterró en ti antes de nacer y ahora eres parte de Su jardín, eres parte de Su Reino y tal vez requieres que el Señor nos trate como el buen jardinero, como ha estado predicando el Pastor Roberto, que nos pode como ha estado predicando el Pastor, pero la promesa aquí es que llevarás fruto en toda buena obra, osea que su buena obra en el Reino de Dios llevará fruto. ¿Quieres llevar fruto? comienza a obrar, comienza a labrar.

Aquí el énfasis no es tanto en lo que haces sino por qué, no es lo que haces sino por qué sea servir de ujier o cuidado de niños, o enseñar en una clase de inglés, o pintar una pared, o palear la nieve, o sacar la basura; si lo haces para agradar a Dios, si lo haces para complacer al Padre dará fruto. A Él le dará gozo y sobre todo como esto es un Reino y como esto es un equipo juntos avanzaremos el Reino de Dios contra el dominio de las tinieblas y ese es el punto, y así el propósito de Dios para su vida se cumplirá.

Una vida digna del Señor es una vida constantemente creciendo en el conocimiento de Dios. Esto me emociona: la palabra aquí no es meramente gnosis que es simplemente entendimiento o ciencia sino epignosis que representa un conocimiento profundo, pleno. No estamos hablando aquí de un conocimiento académico, de libros, aún un conocimiento de la Palabra así por así o lo que oímos de segunda mano acerca de Dios.

La esperanza es esta: al vivir una vida digna del Señor, luchando para complacerlo creceremos en nuestro conocimiento de Dios o entras palabras, como Pablo escribió en otro lugar: "Yo quiero conocerlo a Él, a Jesús, quiero conocerlo y el poder de Su resurrección."

Me encantó en la conferencia de matrimonios que usaran esta frase: "There is no lit to God." No hay tapa para el Señor, no hay cumbre, no hay cima, no hay límite a Dios. Nosotros viviremos eternamente descubriendo aspectos de Él y de nosotros en Él, esto es parte de nuestro privilegio como hijos de Dios, es conocerlo a Él en persona. Descubriremos y esta es la parte que tal vez no le guste a usted, pero descubriremos lucha tras lucha, tentación tras tentación, reto tras reto que hay tanto más a este Dios que nos rescató, primeramente Él es nuestra salvación, El que nos rescató.

A través de nuestras vidas, a través de complacerlo, a través de una vida dedicada a ser digna del Señor descubriremos que el Señor que nos rescató también es el Dios que nos unge; por eso es que los hebreos tenían tantos nombres para Dios. Él es el Dios que nos unge, Él es el Dios que nos sana, Él es el Dios que nos provee, Él es el Dios que tuvo misericordia de nosotros, Él es el Dios que pelea por nosotros, Él es el Dios que nos ama y como capa tras capa, como tratar de abrir una cebolla estamos viendo que no hay fondo para este Dios ni capa para este Dios. Cada día descubriremos que Dios es inmenso y bello, y cada vez como un astrónomo explorando el universo y no se cansa porque siempre hay una maravilla en una esquina del cielo, usted descubrirá maravillas explorando el corazón de su Dios.

Cueste lo que cueste como Job declaró. Después de haber pasado un infierno de pruebas, de huídas que había huído este hombre justo, pero ahora que mis ojos te ven, creceremos. Una vida digna del Señor crece en su conocimiento de Dios.

Hablando de pruebas, las pruebas sí mis hermanos son un aspecto imborrable de una vida digna de Dios, tienen su lugar, tienen su lugar. Porque el Señor promete que seremos, mire en el versículo 11: "Fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de Su Gloria para toda paciencia y longanimidad." Claro, a través de nuestras luchas creceremos en nuestro conocimiento de Dios, así es nuestro entrenamiento pero también descubriremos otras cosas, sí es emocionante.

El Señor nos cubre con una fuerza que jamás imaginaríamos que teníamos, una fuerza que viene de lo alto, que viene de otro lugar. La idea aquí, el idioma lo que está describiendo es que el Señor literalmente nos cubra, la idea del Señor cubriéndonos en la potencia de Su Gloria, in the majesty of His Glory, o en otras traducciones: en la plenitud de Su Majestad, in the fullness of His Glory, literalmente Él viene y te cubre como un chaleco de balas; te fortalece en Su Gloria.

Interesantemente en el Antiguo Testamento se habla de cuando vino el Espíritu de Dios sobre Gedeón, Gedeón se vistió de Dios como si fuera un manto que él se puso, se puso un manto del Espíritu de Dios, un manto de la unción de Dios y en estos momentos en una vida digna del Señor, una vida dirigida por un corazón dedicado a complacerlo, que su blanco es complacer, agradar a este Dios el Señor reconoce los que son de Él y Él te cubrirá como dice el Salmo 91, me encanta el Salmo 91 ¿qué es lo que declara? "Con Sus plumas te cubrirá y debajo de Sus alas estarás seguro, escudo y adarga es Su Verdad."

"No temerás al terror nocturno" perdonen (quebrantado) (aplausos). No temerás al terror nocturno ni saeta que vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad ni mortandad que en medio del día destruya." Te cubre, te cubre y en esos momentos mis hermanos ¿sabe? al ser probado usted tiene todo el derecho de orar de esta manera: Señor sáname, Señor provéeme, Señor pasa de mí esta copa, usted tiene todo el derecho de orar de esta manera y tal vez el Señor te contestará sanándote en el momento, eso creemos en el Nombre de Jesús o proveyendo por ti de una forma maravillosa, gloria a Dios si el Señor llegara a hacer eso.

O tal vez te quitará la copa antes de beberla. Pero mis hermanos, no duden que el Señor pueda decidir que hay una gloria encerrada en esa prueba. Hay una gloria encerrada en esa prueba que perderás de vista si deja de pasar por esas pruebas, un aspecto de la gloria de Dios, una imagen de Dios que no descubrirás a menos que no permitas que el Señor te deje pasar por esas pruebas.

"Te revestirá con el poder de Su fuerza y crecerás cada vez más en paciencia" la palabra: microtimea ¿aquí qué dice literalmente? larga mecha, antes de que explote, paciencia. ¿Quién está pidiendo paciencia? este es el método por el que el Señor nos infunde paciencia. A través de estas pruebas sabemos que el Señor; mira cuando uno se pone la capa de Superman ¿qué te molesta? la gente es la gente pero el Señor te da más paciencia con la gente, más paciencia contigo mismo, Señor pero ¡qué cosas! aquí estoy otra vez y vamos todavía, tenemos trabajo que hacer. Los hombres no lloran Samuel, este... levántate, come on hay trabajo que hacer.

Paciencia con Dios, verdaderamente hermanos ¿qué nos toca si no tener paciencia con Dios? ¿a dónde vamos a ir si no tenemos paciencia? ¿a dónde vamos a ir si sólo Tú tienes Palabra de vida Señor? paciencia y longanimidad, me encanta esta palabra. Quiere decir la capacidad de tolerar, la capacidad de aguantar, la capacidad de ir la distancia.

Esta es la misma palabra que Pablo usa en Filipenses capítulo 4 cuando él declara: "Todo lo hipomunim" "Todo lo puedo tolerar, todo lo puedo resistir." Yo sé lo que es tener la abundancia y yo sé lo que es tener escasez. Yo sé lo que es oír aplausos, yo sé lo que es caminar solo. Yo sé lo que es tener amigos, yo sé lo que es que me den la espalda. Yo sé lo que es la victoria, yo sé lo que es cuando las cosas no me andan bien. Yo sé lo que es tener lana, yo sé lo que es no tenerla; todo lo puedo, hipomunim, todo lo puedo en Cristo que me fortalece, que me forra, que me protege. Es precisamente la misma idea.

Usted no se va a creer que es usted, esto es lo precioso. Usted mismo se va a maravillar, usted se va a oír y usted mismo no se va a creer diciendo: yo sé que vivo con este cáncer, yo sé que estoy criando estos muchachos solo, yo sé que me van a quitar la casa pero nunca he amado a Dios más que ahora, nunca he sentido la Presencia de Dios más que ahora, nunca me he sentido más respaldado por Dios que ahora; todo lo puedo en Cristo que me cubre, que me protege, que me guarda, que me fortalece.

Esas palabras hermano al usted vivir una vida digna del Señor, lo que a Él le importa es que usted llegue a conocerlo, conocer Su capacidad de salvarte, conocer Su capacidad de obrar a tu favor, conocer lo que Dios es capaz de hacer en sociedad contigo y con tu fe, eso es una vida digna del Señor.

Y en medio de esas llamas la persona que vive una vida digna del Señor descubre: gozo, gozo, "Con gozo" versículo 12 "dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz." Una vida digna del Señor mis hermanos y si, tal vez yo me dirijo a muchos hermanos que aman al Señor, lo aman sinceramente y hasta aquí están chequeando todo lo demás, Pastor: yo quiero que mi vida complazca al Señor igualito que usted acaba de predicar, quiero que mi vida agrade al Señor. Pastor: yo quiero crecer en el conocimiento de mi Dios.

Pastor: acaba de predicar mi vida y tú no sabes por lo cual yo he pasado, y es cierto, yo he sentido la fortaleza del Señor, he sentido que el Señor ha hecho una obra en mi vida, yo soy más paciente y tengo una mecha más larga, me sorprendo a mí mismo pero Pastor ¿qué hay del gozo? ¿y qué de la acción de gracias?

Mi hermano: that's the whole point, ese es el punto, ese es el blanco. Una vida digna del Señor se conoce por su gozo, se conoce por su acción de gracias. Esta es la idea que a la manera que llevamos fruto en toda buena obra, que conozcamos a Dios, que resistamos todo lo que el infierno envíe contra nosotros experimentemos un gozo que nos sale del corazón.

¿No lo ha experimentado hermano? le quiero sugerir algo. Comience a celebrar, diga: celebrar, comience a celebrar a su Dios dándole acción de gracias aún por las tonteras más mínimas. Celebre a su Dios.

En contraste un parqueo cerca de su cita en un día de nieve: gloria a Dios, Dios está conmigo, son su siervo. Comience a remolinear ¡wow! ¿viste cómo intervino el Señor conmigo? Dale gracias a Dios. Mira si el Señor proveyó sal para su huevo y una mesa la cual servirlo dale gracias a Dios, dale gracias a Dios.

Si el Señor te proveyó un carro que prende, un Toyota de 12 años que nadie lo mata con 165.000 millas pero te prende ¡gloria a Dios! Ando a pie, ¿tienes cambio para la guagua? gloria a Dios, si no yo tengo aquí pesetas juntas aquí para, ya, dale gloria a Dios. Y ¿sabes qué? eso se va a convertir en un diálogo.

Tú le das gloria a Dios, tú marca, tú crea un altar marcando esos momentos y el Señor te va a hablar y te va a decir: Ando contigo, no estás solo y ¿sabes qué hijo, sabes qué hija? me siento orgulloso de ti. Me siento orgulloso de ti, I'm proud of you; tu vida, tu lucha, ese gesto sencillo de agradarme con una cosa tan pequeña ¿sabes lo que me hace a Mi Corazón? dice el Señor, eso me complace, me llena de placer, te voy a dar una sorpresa: tu vida me complace.

Quiero oír algo fabuloso: tu vida me complace por sí misma. Y si eso no te llena de gozo, si eso no te llena de gozo yo no sé qué más lo podría hacer, el saber que los ojos de tu Creador están sobre ti, se dan cuenta de tus movimientos, tiene cada compás de tu corazón contado y se complace de haberte creado.

Y descubrimos algo más, que nuestra victoria no depende de nosotros sino de Él. Qué lindo, aquí terminamos como comenzamos. Praise the Lord. Descubrimos otra cosa mis hermanos. Un día de estos Él te va a recibir y va a sonreír porque Él ya nos calificó, qué cosa. El punto, hay una enseñanza en esto, era un entrenamiento, esto es como un papá entrenando a un muchacho a jugar fútbol y le viene la bola y tal vez se le va una, se le viene la otra; ese no es el punto, ese no era el objeto porque ya de antemano Dios nos calificó. Dios nos hizo aptos, Dios ya de antemano, ya de antemano tú descubres: pero Señor ¿qué pasó? ganaste, congratulations. Ven acá aquí está tu premio, pero ¿cómo fue esto? ganaste, pero ¿qué, si yo era un fracaso Señor, nada me salía bien? ganaste. Bien hecho, bien buen siervo y fiel ven acá y mira lo que te tengo ya.

Ya de antemano nos calificó, ya de antemano nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz. Quiero decir algo, comenzando conmigo ninguno de nosotros somos, ninguno de nosotros jamás seremos verdaderamente dignos del Señor, jamás seremos verdaderamente dignos del Señor. Como tuvo que hacer con todos los santos entre comillas y todos ellos eran imperfectos, Él nos hace aptos para morar en Su Presencia, Él nos hace aptos para que nosotros lo llamemos Padre y si tú estás dispuesto esta es la Obra que Él hará en ti.

Bajemos nuestros rostros un momento. Padre: no hay quién se compare a Ti. Señor yo te doy gracias, no sé cómo llegamos a este lugar pero sé que llegamos Señor y fue por Tu Gracia y Tu Misericordia. La obra eterna, Señor no hay una alma aquí que no es precioso, que no es preciosa para Ti. Te complaces en crearnos a todos, propósito tienes para cada uno de Dios. Te suplico Maestro, cualquier cosa que esté entre Tú y ellos, cualquier cosa que sirva de obstáculo de tu Obra redentora y poderosa en sus vidas, Señor en el Nombre de Jesús remuevo esa piedra.

Declaro que el día del Señor ha llegado a sus vidas y por Tu Gracia y Tu Poder y el poder de Tu sangre los hará dignos de servir a un Dios tan bueno, tan valioso, tan generoso, tan presente.