Que hace el Espíritu Santo (parte 2)?

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Vamos a la palabra del Señor en Lucas capítulo 5. Continuamos con nuestro tema acerca del Espíritu Santo. Estamos predicando una serie de sermones que hemos llamado sermones ortodoxos. La palabra ortodoxo quiere decir bíblico, correcto, lo pertinente a la sana doctrina, la doctrina histórica de la iglesia. Queremos instruir al pueblo de Dios en las verdades doctrinales esenciales que son de importancia fundamental para la vida cristiana. Y hemos estado visitando una serie de diferentes doctrinas.

Visitamos la doctrina de la gracia, salvación por gracia no por obras. Visitamos también la doctrina de que las obras son importantes, hemos hablado acerca de la responsabilidad de cada individuo delante de Dios, hemos hablado acerca del llamado a predicar la palabra, a ser un pueblo evangelístico, a dejar que nuestra luz brille, ponerla en alto, hemos hablado acerca del hecho de que Dios no quiere que ninguno se pierda, sino que todos procedan a la salvación.

Y hablando acerca de las obras y la importancia de las obras en la vida cristiana, pasamos allí a la obra y la presencia del Espíritu Santo, por qué esa secuencia de las obras y la importancia de vidas den buen comportamiento, de buen fruto, de frutos de justicia, como dice la palabra a la doctrina del Espíritu Santo. Porque hemos dicho que la obra del Espíritu Santo es lo que nos permite no caer en la trampa del legalismo y de la rigidez doctrinal en que muchas veces caen las iglesias y los movimientos que enfatizan la santidad y las obras.

Es muy fácil caer en una creencia como que, si que las obras es lo que me va a salvar aunque decimos lo contrario con la boca, pero como que la… sin el Espíritu Santo la espiritualidad del ser humano va perdiendo su fluidez. ¿Recuerdan que decíamos que el aceite, que es símbolo del Espíritu Santo, se requiere para lubricar las partes de una máquina para mantener las partes fluyendo y moviéndose? Cuando el aceite se endurece, la máquina se pone rígida y se quema el motor y por eso es que Dios ha provisto la unción del Espíritu Santo, para lubricar la vida cristiana, para mantenerla fluyendo y moviéndose porque sino caemos en las obras.

Y yo les voy a decir algo acerca de eso también que el Señor me ha habló hace poco acerca de que pasa cuando una religión o una denominación o una iglesia o un individuo pierde contacto, pierde intimidad con el Espíritu Santo, se cae en el asunto de las obras. Se pierde el concepto de la unción de Dios.

Mire en Lucas capítulo 5 versículo 33, este contraste que se nos presenta aquí entre una espiritualidad llena del Espíritu Santo con la presencia de Jesús que es el espíritu cerca, moviéndose y una religión o una religiosidad cristiana, una espiritualidad cristiana que no tiene una espiritualidad, que no tiene la presencia del espíritu.

Mire lo que pasa aquí… 5:33 Lucas 5:33 dice: “…Entonces ellos (ellos son los fariseos, religión rígida, religión muerta, religión de obras) ....ellos le dijeron ¿por qué los discípulos de Juan ayunan muchas veces y hacen oraciones?” y asimismo los de los fariseos, ¿ve usted allí? obras, obras, obras, religiosidad, oraciones, ayunos, lavarse las manos, todas las cosas que tienen que ver con la religión, no es que esas cosas sean malas, los ritos de la religión y de la espiritualidad no son malos pero cuando eso es todo lo que hay, cuando no es la vida del espíritu, entonces hay un problema serio en la vida espiritual. Dice asimismo de los fariseos

Ahora “.....pero los tuyos -le dicen a Jesús, los discípulos de Jesús, los discípulos de Jesús, aquí usted tiene a hombres que están cerca de Jesús, están llenos del espíritu, están cerca, están recibiendo directamente de Jesucristo. Dice: “…pero los tuyos comen y beben…” -queriendo decir, los tuyos no están con todas esas cuestiones ritualistas, tienen una vida más vital, dependen más de la gracia del Señor, ¿ve?- “…pero los tuyos comen y beben…” -¿recuerdan que a Jesucristo lo acusaban de ser un comedor y un bebedor? Porque él no andaba con esa religiosidad estirada, almidonada, rígida. El Señor no tenía esa conciencia culpable que tenía que estar siempre como presentando una cara de santidad ¿no?

Por eso los discípulos se sorprenden cuando él esta con la mujer samaritana hablando a mediodía en la plaza del pueblo y los fariseos jamás usted los hubiera visto con una mujer hablando porque eso era poner sospecha sobre su santidad y su espiritualidad.

Pero el Señor no tenía ese complejo, él fluía libremente. Él estaba en una boda, por ejemplo en la boda de Canaá, oró allí por el vino, él cenaba con los fariseos, perdón con los publicanos, tenía conversación con las prostitutas, él no tenía esos complejos.

Usted ve lo que pasa cuando uno está seguro en Dios y uno tiene la llenura del Espíritu y la espiritualidad de uno fluye y escucha de Dios y se ajusta a las circunstancias y discierne el espíritu. Porque el espíritu está dentro de ti, te permite discernir lo que es de Dios y lo que no es de Dios. Tu no tienes que andar por ahí con esos complejos. Tu espiritualidad es una espiritualidad sana.

Recuerdan lo que yo les he dicho de cuando usted vea un iglesia donde la gente está que no comas, no bebas, no toques, no hagas, no digas y todo es pecado y todo es el diablo por aquí, el diablo te va a hacer esto… eso no es espiritualidad sana, eso es una espiritualidad compulsiva, neurótica, carnal que ha ido perdiendo el contacto.

Ahora donde usted ve una espiritualidad que hay santidad pero es una santidad fluida, es espontánea, hay alegría, hay contacto entre los hermanos, hay libertad para expresar a Dios, no esa rigidez.

A veces se hacen cosas que pueden parecer que no son de Dios, pero son de Dios porque se está discerniendo el espíritu. Hay veces en que si usted discierne el espíritu, usted va a ser llevado a hacer cosas que a los religiosos les va a parecer como que no es de Dios. Por ejemplo, cuando los discípulos comían del pan, del trigo, recogían espigas el sábado, uhh eso escandalizó a los fariseos, porque no se suponía que se hiciera nada.

¿Sabe usted que hasta hoy los judíos ortodoxos no prenden ni siquiera una luz en el día sábado? Porque prender, darle un swicth, eso es hacer trabajo, eso es trabajar, imagínese.

¿Por que?¿Qué pasa cuando la religión no tiene el continuo updating, el continuo discernimiento del espíritu? entonces uno se mete en los sistemas rígidos. Y los sistemas toman control en vez de el discernimiento continuo del Espíritu. Por eso el Señor Jesucristo cuando lo acusaban de ser así tan libre, él se ponía furioso con los fariseos.

Otro pasaje que él les recordó, les dijo: ¿ustedes recuerdan cuando David y sus hombres estaban huyendo de Saúl y estaban muriéndose de hambre y llegaron al templo y no había nada de comida y lo único que había de comida era el pan de la proposición que estaba sobre el altar consagrado y cualquiera que comiera de ese pan era sentencia de muerte? Porque tan sagrado era el pan de la proposición, no se suponía que nadie que no fuera un sacerdote lo tocara.

Y cuando David y sus hombres llegaron allí con hambre y el sacerdote les dijo: “bueno mira, lo único que hay es el pan de la proposición” y ¿sabes qué? ellos se lo comieron y el Señor les dijo y ¿sabes que? ¿Qué es más importante, los ritos del hombre o el hombre en si?, ¿para quién fue hecho el sábado, para el hombre o el hombre para el sábado?

Había hambre, la vida es más importante para Dios que el cuidar de un rito, ¿se entiende? Hay cosas muchas veces que en el proceso de la consejería, del trato con las personas, el espíritu les va a guiar a usted a un momento de misericordia.

Ahora yo no le digo esto para que seamos ¿tu sabes? Libertinos, no!!! Pero yo he visto momentos en que hay que estirar un poquito la rigidez de los patrones religiosos para que el Espíritu Santo pueda caber. ¿Si o no? ¿Cuántos dicen amen a eso?

Y solamente una persona llena del Espíritu Santo, que está a tono con la voz de Dios en el momento puede tener el discernimiento para saber cómo conjugar una situación que no está en el manual y saber cómo navegar ese estrecho y llegar al otro lado.

Por eso el Señor … y eso… toda espiritualidad cristiana que tiene el fluir del Espíritu Santo, la presencia del Espíritu Santo no va a caber dentro de los patrones rígidos de la religión muerta. Porque el espíritu no puede ser contenido. Por eso más adelante el Señor habla de los odres viejos, que usted no puede poner el vino nuevo en un odre viejo. Yo se que aquí nadie sabe de vino ni nada porque nadie toma aquí vino pero déjenme darle una explicación que me dijeron a mi, yo leí eso hace años atrás ¿ok?

El vino cuando es nuevo, todavía está en proceso de expandirse el alcohol que está en las burbujas de aire, comienzan a expandirse y el vino cuando es nuevo se ancha, se crece porque es como la levadura, el pan que se infla ¿no? Entonces si usted coge un vino nuevo que todavía no está maduro y usted lo hecha en un odre es decir… antes el vino se ponía en unas cosas de cuero ¿no? containers de cuero y cuando un cuero se ponía… ¿qué pasa cuando un cuero de envejece? Se pone duro, pierde su flexibilidad, no fluye, no se mueve, no se estira con la presión, ya está duro.

Entonces, si usted mete vino nuevo que tiene que expandirse y fíjese el Señor hablaba… esta era una señal ¿de qué? del Espíritu Santo. El vino siempre se asocia con el Espíritu Santo ¿si o no? Y el Espíritu Santo se asocia con la efervescencia, con las cosas que se expanden, las cosas que saltan, el agua, ríos de agua viva correrán de su interior, saltarán de su interior. El vino es símbolo de la presencia del Espíritu Santo.

Entonces el Señor les dice a los fariseos: no se puede meter vino nuevo en odre viejo porque sino cuando el vino se expande rompe. Déjenme decirle la fuerza atómica es irresistible. Cuando un átomo que es lo que está dentro del vino, comienza a hacer su proceso, mire rompe no digo yo un odre de cuero, rompe una caja de acero, la rompe porque lo atómico es eso. Mire lo que es la fuerza atómica. No puede ser contenido. El Espíritu Santo no puede caber jamás en una religión muerta, el Espíritu Santo requiere una espiritualidad viva, sana, abierta, ¿usted entiende?

Y por eso es que la verdad de Jesucristo no podía caber dentro del judaísmo farisaico, tenía que destruirlo y echarlo a un lado para que viniera otra cosa nueva. Porque iban siempre los que iban a hacer esta tarde es meter, encajar al espíritu de Dios, no se puede.

Entonces por eso el Señor… ellos dicen: porque Juan y sus discípulos que pertenecían Juan aun conociendo a Jesucristo pero recuerdan que dice: yo bautizaré con agua, Juan solamente conocía la espiritualidad antigua, como hay tantos cristianos, gente buena, se van al cielo con todo y zapatos pero no tienen la experiencia del Espíritu Santo.

Entonces están limitados, yo no digo que una persona que no tenga la llenura o la unción o el bautismo del Espíritu Santo no se va a salvar, Dios me libre. Porque lo que usted necesita es a Cristo, fe en Jesús, su gracia.

Pero óigame, ¿cuánto más habría de poder si uno tuviera la llenura y el bautismo del Espíritu Santo en su vida? Digo esto con mucho respeto porque la madre Teresa es una mujer digna de admiración, ¿usted conocen a la madre Teresa verdad? Murió hace poco y una mujer que hizo obras increíbles, dedicó su vida al Señor, sirvió al Señor, hizo cosas tremendas por la humanidad, ganó el premio Nóbel de hecho, y una mujer íntegra completamente. Se atrevió a decirle al presidente Clinton en su cara cosas que nadie más se hubiera atrevido a decírselo en público. Una mujer vertical completamente.

Pero hace poco salió un libro acerca de las terribles dudas de las cuales ella padeció toda su vida. Acerca de si Dios la amaba, si Jesucristo estaba con ella. Y yo se que la duda es importante en la vida cristiana. Y yo se que todos tenemos luchas y yo creo que es importante reconocer esas luchas pero yo creo que cuando… mire hermano, cuando uno ha tenido un encuentro con el Espíritu Santo, uno puede tener sus momentos pero nuestra vida no va a estar definida por la duda y el temor, y por la duda de si Dios me ama o no me ama y digo esto con tremendo y profundo respeto.

A veces yo veo eso de gente que yo amo, evangélicos que aman a Dios, sirven al Señor, son gente de la palabra, tienen más integridad que muchos evangélicos llenos del Espíritu Santo. Y yo prefiero, cuando esté en un trinchera, estar con ellos que con un pentecostal a veces déjenme decirles, pero yo digo caramba, ¿si hubieran experimentado el bautismo del Espíritu Santo en su vida? Si tuvieran una vida que se refrescara continuamente con el agua que refresca y que lubrica el aceite del Espíritu Santo que lubrica, ¿cuánto más poderosos serían?

Yo me pregunto si la madre Teresa hubiera experimentado el bautismo pentecostal del Espíritu Santo ¿qué cosas no habría hecho esa mujer? Dios mío. No es que estemos empobreciendo lo que hizo, pero así pasa con tantos evangélicos también. Tantas iglesias y como los discípulos efesios de los cuales hablábamos con ustedes, preguntan ¿recibieron el bautismo del Espíritu Santo? y dicen: mira, ni siquiera sabemos que es eso del bautismo del Espíritu Santo. Nos convertimos, aceptamos a Cristo como Señor y salvador, hemos ido a la iglesia, diezmamos, cantamos himnos, tratamos de vivir una vida santa y agradable a Dios, pero no sabemos. Hay tanta gente ignorante de la necesidad del Espíritu Santo hermanos, porque yo creo que se puede tener mucha piedad pero no tener el gozo del espíritu.

Y eso se aplica aquí, no estoy señalando a la madre Teresa porque sea católica, estoy señalando como un ejemplo, porque yo lo veo en tantos otros lugares también, es más, aquí mismo en nuestra iglesia puede haber personas y las habrá estoy seguro que necesitan una visitación del Espíritu Santo, las hay y por eso es que yo tomo este tiempo. Yo no siempre estoy hablando del Espíritu Santo porque uno no puede… hay tantas otras doctrinas que son importantes pero cuando es el momento, uno habla y refresca esa doctrina. Amen.

Porque hay iglesia siempre están hablando del Espíritu Santo y todo es siempre una cuestión de siempre mantener batido este huevo del Espíritu Santo y no se puede!! Porque hay tantas otras cosas, hay tantas otras cosas importantes, hay iglesias y gente yo me resisto a eso, que dependen de un pentecostalismo artificial, donde continuamente, cada servicio la gente tiene que venir para que le inflen la goma otra vez, porque se le desinfló durante la semana. Y yo me revelo contra eso ¿usted entiende? Yo podría cada domingo que ustedes vienen aquí tener un show pentecostal, pero yo me rehúso a eso porque la vida espiritual no es que vengan y le soplen en respiración artificial para que le dure hasta el domingo que usted vuelva otra vez aquí destruido y arrastrándose para que vuelvan otra vez a llenarle la goma, no se puede.

Llega un momento en que usted tiene que asumir la responsabilidad por su vida espiritual, ¿usted entiende? Y cuando usted viene a la iglesia, usted buscar la llenura del Espíritu Santo y cuando tienen un reto como tenía nuestra hermana aquí hoy para pararse aquí al frente, pues métase a las 6 de la mañana a buscar el valor y el poder del espíritu para que cuando se pare aquí, haga el buen trabajo que hizo ella cuando llegó aquí arriba. Y cuando usted tenga un problema no venga: “pastor, ore por mi por favor, que el diablo esto…” no, busque usted la llenura del Espíritu Santo directamente, pelee , usted tiene el poder de Dios en su vida, usted tienen la llenura del Espíritu Santo como dice la palabra, la unción del santo está en usted también.

Yo creo que tenemos que pedir a los demás que oren por nosotros, claro que si, eso es importante, pero óigame usted se está perdiendo la oportunidad de usar la espada que Dios ha puesto en su mano. Dice la palabra, que nos vistamos de toda la armadura de Dios para que cuando venga el día malo podamos resistir y habiendo acabado todo, estar firmes, aleluya. Cada uno de nosotros tiene que vestirse de su armadura, tenemos que estar llenos, tenemos que estar forrados de la presencia del Espíritu Santo.

Hermanos, Dios quiere un pueblo que sepa como guerrear contra Satanás individualmente. Cuando el diablo se aparezca para hacerte daño, tú tienes tu espada, tú tienes tu pechera, tienen tus botas, tienes tu yelmo, tienes tu escudo y tú sabes como defenderte de los ataques del diablo. Pero tu tienes que hacer eso, tu!

Yo te puedo instruir, nosotros te podemos enseñar, te podemos dar clase de disculpado que te den un fundamento teológico doctrinal, pero si tu no usas las armas de Dios, no te va a servir de nada. Usted tiene que estar continuamente buscando.

Yo como pastor necesito… imagínese, yo no puedo… yo no podría sobrevivir jamás se los aseguro, si yo no buscara cada día el pan de Dios por medio de la oración y la palabra y la meditación y el recordatorio continuo de las verdades de Dios en mi vida. Porque me agota continuamente el trabajo ministerial y si yo no buscara esa llenura, ese refrescamiento… uno tiene que tener continuamente un medidor de su llenura espiritual, siempre. Usted tienen que tener… eso tiene que venir con el termómetro y con las demás cosas que usted tiene en su vida. Tiene que haber un espiritómetro donde usted mida donde está el Espíritu Santo hoy en mi vida, ¿usted entiende?

Y usted lo mira y ehh está como a un cuarto, tiempo de volver a llenarme del Espíritu Santo ¿usted entiende? ¿Cuántos dicen amen a eso? Denle gloria a Dios.

¿Qué hace uno con la gasolina del carro? uno siempre está mirando, desgraciadamente siempre uno tiene que estar mirando y más cuando cuesta 3 dólares el galón, como le duele a uno ¿verdad que si? Pero siempre uno tiene que estar mirando: ohh, hoy esta ¾, está bien, puedo seguir manejando, ya dentro de un par de días cuando usted fue ahí a Woburn o se fue por allá por Providence, lo que sea, uff!! ya está en ¼, ya está un poquito más bajo, y si usted es como yo, ya está, el carro está tosiendo ya, usando el humo nada más de la gasolina y llega ahí a la gasolinera para llenarlo otra vez.

Pero si usted no mira donde está continuamente, nosotros estamos gastando energía espiritual, continuamente. Entonces tenemos que volver y llenarnos de nuevo del Espíritu Santo.

Eso es hasta que tú te mueras, entonces cuando tú te mueras, pasó el peligro porque entonces Dios te va a llenar continuamente con su presencia por toda la eternidad. Aleluya.

Pero mientras estés aquí, tú eres un atleta espiritual, tienes que estar buscando la llenura del Espíritu Santo, tú no puedes depender del ayer, a ese corito que dice “unción Dios, derrama en mi, unción Dios, derrama en mi” ¿no? Hay que pedirle que el poder de tu espíritu fluya en mí.

Unción Dios, derrama en mi ¿no? Hoy, usted no puede vivir de la unción de ayer. El maná tenia que recogerse ¿cuándo? Cada día. Eso es una señal porque el maná venía del cielo, alimento de Dios para su pueblo. Y hay una lección allí, si usted recogía maná para dos días, en el segundo día olía mal, se pudría, tenía que ser cada día. Y cada día tú tienes que buscar fresca unción de Dios.

Escúchame bien, y cuando tu vengas a la casa del Señor y tu vengas cansado o atribulado o con un problema o ahí desgastado, no te pongas a cantar así en seco, busca un tiempo de estar en la presencia, cierra tus ojos, pide que la unción de Dios te llene, que Dios te haga poroso, que mueva tu tierra con un rastrillo para que la semilla del Espíritu Santo caiga hondo en tu vida y pueda dar fruto. Toma tiempo, eso te toca a ti. Tú tienes que hacerlo. Hay una parte que nosotros podemos hacer aquí arriba pero hay una parte que tu tienes que hacer, la adoración a Dios tiene que ser interactiva. Tu y nosotros, todos obrando para levantar una gran sinfonía que agrade el oído del Señor.

Gente unida va a hacer una adoración ungida, gente que ha avivado el fuego del don de Dios en ellos va a tener una adoración adecuada y una vida adecuada.

Hermanos, por favor grabe esto y lléveselo a la casa y póngalo todos los días si es necesario, para recordarse de ese hecho, porque yo no voy a estar todo el tiempo recordándole eso, no, no, exactamente, yo no puedo estar machacando esto continuamente.

Llega un momento usted tiene que asumir su propia responsabilidad acerca de su propia unción. Porque yo no hable de ello un domingo no quiere decir que se me ha olvidado. Yo hago mi parte, yo se lo que a mi me toca, como hombre, como individuo y lo que a ti te toca. Eso está en tu responsabilidad.

¿Cómo le habla Pablo a Timoteo?, que era un pastor joven que necesitaba tener la unción de Dios y que conocía estas doctrinas. Y Pablo le dice en segunda de Timoteo, capítulo 1, dice: “…por lo cual te aconsejo…”, segunda Timoteo 1:6 “…por lo cual te aconsejo que avives…”, digan todos avives, “…avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos…”

Mire lo que dice aquí, aviva el fuego del don de Dios que está en ti. Y uno diría: bueno, si está en él ¿para qué tienes que avivarlo? porque el don de Dios hay que avivarlo. La idea es sopla, abanica el don de Dios en el griego original la idea fan into flame the spirit of God.

Porque una llama tiene que soplarse para mantenerse viva y Pablo le dice esto a un joven que servía al Señor de una manera profunda. Hay que avivar el fuego del don de Dios, el Espíritu Santo está en ti, tu lo recibiste cuando recibiste a Cristo como tu Señor salvador pero la Biblia te llama a abanicarlo, a avivarlo.

Hay momento en que tu… yo entiendo eso tan y tan bien, porque todos estos años que yo he servido al Señor yo… y es fluido… y yo tengo que saber cuando me estoy desgatando y cuando tengo que volver a llenar.

Y es más, aparte de mis devocionales diarios tiene que haber tiempo también tiempos y momentos en que yo tengo que buscar de Dios de una manera más profunda todavía. Coger un día, dos días y apartarme y ayunar o estar lleno de la presencia y dedicar más tiempo para la oración y otras cosas y yo enseguida veo como el espiritómetro sube a full. Y es diferente, me siento completamente diferente.

Mire, esta mañana cuando comenzamos el servicio, tomamos tiempo para buscar la presencia de Dios, escogimos coros que exaltaban la obra del Espíritu Santo ¿usted no sintió una diferencia en la alabanza? ¿Si o no? Ve, a diferencia de muchas veces cuando no… bateamos pero la bola no sale del plato, de home.

Porque es importante hermanos, tomar tiempo, es esfuerzo, pero Dios no lo hace todo por nosotros, hay que vivir una vida llena del Espíritu Santo y eso es lo que impide que nuestra espiritualidad se vuelva rígida, se vuelva orientada solamente hacia las obras como estaban los fariseos.

El Señor les dijo algo bien interesante a los discípulos aquí en este pasaje de Lucas capítulo 5, cuando le preguntaron acerca de eso dijo, él les dijo: “…podéis acaso hacer que los que están de bodas ayunen, entre tanto que el esposo está con ellos, más vendrán días cuando el esposo les será quitado entonces en aquellos días ayunarán…”

Eso fue muy profundo. Él estaba hablando de algo aquí bien especifico y era que él sabía que un día él iba a ascender de nuevo y ya él no lo iban a tener con él y en ese tiempo iba a ser necesario hacer lo que nosotros hacemos: ayunar, orar. Porque ya no podíamos depender de la presencia continua de él como estos discípulos

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Ahora se requiere un poquito más de esfuerzo. Pero hay algo también que yo veo aquí bien importante y es esto, de que mientras más poderosa sea la presencia de Dios en tu vida, menos tu tienes que estarte matando con las obras y los ritos y las cosas.

Ahora según… es lo que pasa que las iglesias mientras más se van a alejando de la presencia del esposo y de la intimidad con el esposo, más distantes se sienten y más tienen que esforzarse para producir el mismo efecto, más trabajo hay que hacer para que haya gozo, haya fluidez, haya crecimiento, haya efectividad, haya impacto. Pero cuando el espíritu está cerca, todo se hace con menos esfuerzo. Los montes se derriban con gritos de gracia, gracia a como dice uno de los pasajes proféticos del Antiguo Testamento, no hay que andar por ahí con grúas y con dinamita, no necesitas hacer todas esas cosas. Ve cuando el Espíritu Santo está en tu vida, tu vida espiritual no requiere tanto esfuerzo, matarte tanto.

El Señor creo que me aclaro algo, escuche esto porque es bien interesante. Toda espiritualidad cristiana que se aleja de la presencia del Espíritu Santo y de la intimidad con Cristo Jesús, termina en obras. Mire cierta ala del pentecostalismo. Hay grupos pentescostales que a pesar de que hablan del Espíritu Santo pero en realidad se han alejado del Espíritu Santo y caen en rigidez, doctrinas de hombres, retienen todo el aparato y el menear de los moños y que se le cae el pelo, y que se caen en el piso y esto y esto, pero les falta… no tiene su espiritualidad la belleza de la presencia del Espíritu Santo y ¿qué pasa? Se ponen rígidos.

¿Cuán largo es el vestido? ¿Cuánto makeup tiene la pobre mujer en la cara? Si se cortó el pelo o no, si se afeitó las piernas o no, si el hombre tiene bigote o barba o no. Todo es rigidez, rito, externalización de la espiritualidad.

De nuevo con respeto, mire cuando las reformas vienen a Roma en el siglo XVI, Martin Lutero se revela contra el énfasis sobre las obras, sobre hacer penitencias, sobre las indulgencias, sobre todo el aspecto externo de la vida espiritual del catolicismo en Roma. Como hubo tantos movimientos monásticos a través de la historia que buscaron la renovación de la religión romana, porque se estaba…

Eso es lo que pasa hermanos, cualquier espiritualidad es como un instrumento de música, que si no se afina periódicamente no toca bien. Toda espiritualidad a fuerza de ser usada va perdiendo su tonalidad perfecta y hay que volver a afinarla. Todo, coja una guitarra después de que usted la usó mucho tiempo, tiene que volver a afinar las cuerdas, porque se estiran y pierden su tonalidad precisa.

Así pasa con toda espiritualidad, toda iglesia. A fuerza del uso y el roce y el trabajo va desafinándose y si no se vuelve a ungir y a llenar del espíritu, va perdiendo…

Entonces Martin Lutero se encuentra con que esta espiritualidad externalizada, no lo llena. Es un hombre que ama a Dios, se porta bien, hace todo lo posible, es un monje que se pasa… no come bien porque está ayunando. Dice que una vez casi se congeló en la noche por torturar su cuerpo no poniéndose una sabana en el medio del frió de Alemania en una noche friolenta. Era un hombre que amaba a Dios pero no tenía paz en su corazón. Porque la religión romana se había ido alejando, metiéndose más y más en la política y en las cosas humanas y en la vanidad y entonces no había la presencia del espíritu, cayó en obras. Entonces todo lo externo.

Mire también lo mismo pasa hoy en día con el liberalismo protestante, tantos evangélicos liberales que hay hoy en día. Todas estas iglesia mainline, paradise and church, es bien interesante lo que pasa.

Mire esto, los evangélicos modernistas liberales, hoy en día se han alejado de la palabra de Dios, se han alejado del espíritu y han caído también en obras, ¿cuáles obras? las obras de justicia social.

Yo creo en la justicia social, escúchenme nuestra iglesia trabaja mucho en justicia social. Hoy hablamos de programas para jóvenes, hablamos de clases de inglés, hablamos de un taller para seguros de salud. Nosotros creemos en las obras de justicia, pero ¿sabes qué? las obras de justicia son totalmente secundarias a la presencia del espíritu.

Pero muchas de estas religiones liberales, como han perdido la presencia del Espíritu Santo en sus servicios, lo único que les queda para justificar su existencia es hacerle bien a los demás.

Y muchos se van a quejar de lo que yo digo pero lo digo creo con autoridad, he meditado mucho sobre esto.

Y entonces van haciendo algo que justifica su fe. No es que eso sea malo pero ya el origen de ese mover no es un origen bíblico espiritual, es un origen compulsivo, es la psicología humana, el subconsciente tratando de compensar por el hecho de que les falta la presencia viva del Espíritu Santo. Que no pueden evangelizar, que la gente no está viniendo a sus iglesia, se está muriendo su iglesia, no hay transformación de vida, no tienen efectividad en el cambio de la verdadera… el verdadero cambio de la sociedad, no hay gozo del espíritu en sus reuniones, el espíritu no fluye, la palabra no fluye, su predicación no es predicación ungida, la gente no experimenta el gozo del Señor. Están tan atados como cuando eran inconversos y entonces lo único que queda es hacer buenas obras para hacerse creer que estamos bien.

¿Ve? Porque cualquier espiritualidad cristiana que no tiene la fluidez del espíritu, al no haber espíritu termina en obras. Esta iglesia si no se mantiene viva en el espíritu, termina en lo mismo. Porque las obras se manifiestan en muchas maneras, puede ser justicia social, puede ser rigidez doctrinal, puede ser legalismo.

Hay muchas formas en que la falta del espíritu se … y por eso es que tu tienes que buscar la llenura del espíritu en tu vida, la unción porque eso es lo que mantienen el gozo del Espíritu Santo dentro de ti. ¿Entiendes?

Por eso es que esta gente no podía entender cómo los discípulos podían gozarse y comer y tener esa libertad que sentían, porque tenían a Jesús que continuamente les estaba enseñando y mostrándole la verdadera verdad del Padre, interpretando de las cosas continuamente.

Hay que ser lleno del Espíritu Santo y hay que buscar eso continuamente porque sin eso, estamos perdidos.

Voy a terminar porque quiero… y voy a seguir más adelante porque esta doctrina es muy, muy importante. La llenura del Espíritu Santo

¿Sabes qué? Quiero mostrarles bíblicamente algo. Se puede ser religioso y cristiano y tener una aceptación de Jesús como nuestro salvador pero no ser llenos del Espíritu Santo. Son dos cosas… hay lo que la Biblia llama el bautismo de Juan, que es el bautismo en agua. Y hay lo que la Biblia llama el bautismo del Espíritu Santo, que es esa experiencia con el espíritu que es como una segunda experiencia.

Y yo les quiero hablar después acerca de eso, qué es lo que caracteriza a esa segunda experiencia. Hay mucha, hay mucha mala enseñanza acerca de como se recibe el Espíritu Santo y qué es ser lleno del Espíritu Santo. Y yo espero tener la oportunidad de hacer eso también más adelante pero mire por ahora este hecho de que se necesita… hay dos bautismos, el bautismo de Juan y el bautismo del Espíritu Santo.

Busque por ejemplo, ya ustedes recuerdan un pasaje, es más hacia adelante, Lucas capítulo 3, versículo 16, Lucas 3:16, comencemos por ahí, 3:16, ustedes recodarán, Juan el Bautista les dijo a los seguidores de él lo siguiente: “…dice respondió Juan diciendo a todos…”, 3:16 “…yo a la verdad os bautizo… ¿en qué? .....en agua ¿ok? Pero viene uno más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de su calzado, Él os bautizará en Espíritu Santo y fuego.....”

EL bautismo de Jesús, Jesús se especializa, ¿quién bautiza en el Espíritu Santo? Jesucristo, esa es su especialidad.

Jesús y el Espíritu Santo tienen una intimidad muy profunda porque son dos de las tres personas de la trinidad, el Señor Jesucristo bautiza con Espíritu Santo y con fuego. Mire ahí, dos bautismos, bautismo de Juan que es con agua y bautismo con el espíritu… a mi no me importa cuanta complejidad ustedes quieran meter en este asunto, y las hay.

Lo que yo veo continuamente en la escritura es que una y otra vez se traza esa diferencia entre una espiritualidad basada solamente en lo nominal de la vida cristina, lo básico y una espiritualidad fluyente, poderosa, vital, que está llena del Espíritu Santo. Eso es algo que nadie me puede decir a mi que no.

Y a través de la historia, diferentes grandes pensadores de la Iglesia y diferentes grandes movimientos de la Iglesia han entendido que hay esa diferencia, que hay una… como dos experiencias de bautismo en la vida cristiana. Algunos lo han manifestando en términos de los dones pentecostales y otros lo han manifestado en términos de santidad, una vida de acercamiento al Señor, sin enfatizar los dones pero siempre reconociendo que hay dos espiritualidades por así decirlo. Dos llenuras o dos experiencias con respecto a Jesús y el bautismo del Espíritu Santo.

Y usted mire, lea la teología de la Iglesia a través de los siglos, a través de los siglos porque algunos dicen solamente ohh el movimiento pentecostal; mire siempre ha habido manifestaciones del Espíritu a través de toda la historia. Siempre ha habido movimientos que se caracterizan… dentro de la Iglesia católica los ha habido, dentro de la iglesia evangélica los ha habido en el siglo 18, siglo 16, 17, 19, 20 y 21 lo habrá siempre porque la gente siempre ha reconocido eso, experimentalmente lo han reconocido o lo han reconocido teológicamente a través de la Biblia.

Buenos ahí ustedes tienen un pasaje, Juan les dice eso ¿no? Váyase ahora a Hechos capítulo 8, versículo 16… por eso les digo: Traigan su Biblia, traigan su Biblia, ¡cuántos trajeron su Biblia este día? amén, si usted no tiene una Biblia hermano trataremos de conseguirla una pero traiga su Biblia a la iglesia, es importante, su Biblia es un símbolo de que usted no se avergüenza del evangelio, ¿OK? Y si usted necesita su Biblia, si usted usa su Biblia, tráigala a la iglesia para que… es un statement que usted hace a si mismo y a los demás. Además se necesita, miren esto es…

Los samaritanos, un grupo de gente en Samaria dice, Hechos 8.14, dice: “…cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan....”

Miren esto: estos samaritanos se convierten al Evangelio, han recibido la palabra de Dios, pero entonces cuando oyen eso los apóstoles que son los dirigentes de la Iglesia en Jerusalén envían de una vez una comitiva para enseñarles la verdades más profundas del Evangelio y discipularlos y adoctrinarlos.

Dice: “…los cuáles habiendo venido, oraron por ellos ¿para qué? para que recibiesen el Espíritu Santo....” Mire, creyeron en Jesucristo pero ahora los apóstoles son enviados para que reciban el Espíritu Santo.

Hay mucha gente que dice: ya yo recibí a Cristo, ya no necesito más nada, el paquete lo tengo completo. Ahora recuerde una cosa que muchas veces la Biblia habla de recibir al Espíritu Santo, no en el sentido de tenerlo dentro de uno, sino de recibir el bautismo del Espíritu Santo. Lo que pasa es que no lo usan en una manera técnica la palabra, pero es recibir el Espíritu Santo muchas veces en el libro de los Hechos quiere decir recibir la llenura, la unción, el bautismo del Espíritu Santo. Y eso lo que yo creo que quiere decir aquí; los enviaron para asegurarse de que recibieran la llenura, el bautismo del Espíritu Santo.

Por eso hermanos, yo les digo, después yo voy a hablar más a cerca de eso, cómo se recibe el bautismo del Espíritu Santo, pero si tu no estás seguro, si tu no has recibido el Espíritu Santo, si tu simplemente te has conformado con una religiosidad esencial yo te animo a inquietarte.

Mi deseo es en este día es solamente inquietarte para que busques el bautismo del Espíritu Santo en tu vida. Esta iglesia cree en el bautismo del Espíritu Santo.

Se… recuerden eso, yo no hablo de eso continuamente pero en mi vida yo no podría vivir si no tuviera esa llenura del Espíritu Santo. Y esta iglesia, su doctrina oficial es una doctrina pentecostal, no en el sentido denominacional de la palabra, pero en el sentido bíblico de la palabra.

Entonces se envían los Apóstoles para que oren por ellos, para que reciban el Espíritu Santo, dicen: “…porque aun no había descendido sobre ninguno de ellos, sino que solamente habían sido bautizados en el nombre de Jesús....”

Mire que interesante: son bautizados en el nombre de Jesús, creen en Jesús pero todavía no han recibido el bautismo del Espíritu Santo. ¿Cuántas personas creen en Jesucristo pero no han tenido esa experiencia pentecostal? y necesitan…

Ahora usted puede, le digo así en anticipación, usted puede recibir el Espíritu Santo tanto porque una persona ungida y llena el Espíritu Santo ore por usted y en fe usted recibe esa oración o usted mismo puede recibir el Espíritu Santo orando directamente para que el Señor lo bautice a usted. Eso es para los que están cerca, los que están lejos del Señor, el Señor quiere hacerlo, el Señor lo hace.

Ahora lo que pasa es que hemos llenado con tantas malas enseñanzas esa experiencia que hoy en día muchas veces la gente recibe pero no sabe que recibe porque le han dicho que tiene que ser de esta manera y como no se le da esta manera porque el Espíritu Santo fluye como le da la gana; pues dice: no recibí. Usted ve que siempre están buscando que el Señor los bautice de nuevo porque no han tenido una experiencia definitiva, no se han apropiado… ya lo tengo y no tengo que estar buscando que alguien me ponga la mano, o que tal apóstol o que tal fulanito o que… hay gente que vive siempre buscando algún mago que les haga el trabajo.

Son ustedes que tienen que recibirlo y decir: lo tengo por fe y ya se acabó, problema resuelto, ¿Dónde está el Diablo para darle un batazo?

Dice aquí entonces, “.....porque solamente habían sido bautizados en el nombre de Jesús, dice, entonces les imponían las manos y recibían el Espíritu Santo....”

¿Usted ve? dos bautismos, dos espiritualidades en un sentidos por así decirlo, en el nombre de Jesús, un cristiano salvo, seguro de su salvación pero todavía necesita esa infusión del poder del Espíritu Santo, como los discípulos en el antiguo…. en el libro de los Hechos al principio: “…pero recibiréis poder cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo y entonces me seréis testigos en Jerusalén, en Judea, en Samaria, y en toda la tierra”

Ya tenían a Jesús, lo tenían ahí vivito y coleando al lado de ellos pero no habían recibido el bautismo del Espíritu Santo todavía y lo necesitaban para poder avanzar.

Entonces aquí tienen otro grupo más, los samaritanos.

Vamos a otro grupo más capítulo 19, libro de los Hechos y con esto ya termino, es que los hermanos guau, ha pasado el tiempo, eso es lo que pasa cuando hay un servicio pentecostal, se nos va el tiempo, no se preocupen, la comida está ahí todavía esperándoles.

Nos vamos al 18, Capítulo 18, gracias Samuel, capítulos 18, versículo 24 al 26. Ya leímos acerca de los efesios también, ¿no? que les había pasado lo mismo… dice:

“…Llegó entonces a Éfeso un judío…” ah no, no éste es otro, éste es Apolos, yo tengo tantas citas que ya se me cruzan, éste Apolos, un hombre ama al Señor, está predicando, es un hombre tremendamente ilustre, es un erudito, parece que era un fariseo, un filósofo, Apolos tenía un entrenamiento filosófico tremendo, conoce a Jesucristo, recibe a Jesús y se pone a predicar la palabra y está haciendo bien efectivo en la predicación. Mire lo que pasa aquí dice:

“…llegó entonces a Éfeso un judío llamado Apolos, natural de Alejandría, varón elocuente, poderoso en las escrituras, éste había sido instruido en el camino del Señor…” ¿ve? conocía a Jesucristo como su salvador, estaba predicándolo… “…y siendo de espíritu fervoroso…”, es interesante eso, tenía un temperamento fervoroso, tenía un temperamento emprendedor, diligente y por eso era evangelista, pero mire que era más bien en el sentido de que tenía un temperamento fervoroso. Cuando la persona no ha recibido el Espíritu Santo muchas veces lo que hace, lo hace debido a sus propias facultades naturales personales.

Hay mucha gente que son efectivos en el evangelio, no necesariamente porque tienen la gasolina del Espíritu Santo, sino porque tienen mucha inteligencia, tienen gran corazón, son dinámicos, son emprendedores, son activos y hay muchas iglesias así, hacen muchas cosas pero es solamente porque hay pastores fuertes, dinámicos, emprendedores, siempre están dando a la manigueta para que la gente se mantenga contenta ¿no? y tienen programas, y tienen campañas y tienen fiestas y todo eso, y la gente siempre está eléctrica, pero es porque es simplemente algo de temperamento ¿no? No es… no quiere decir necesariamente que está la energía del espíritu en ellos.

Apolos predicaba, y servía porque era fiel, era un hombre dinámico, emprendedor, tenía empuje, pero no necesariamente tenía lo que necesitaba. Dice: “…era de espíritu fervoroso, hablaba y enseñaba diligentemente lo concerniente al Señor”, mire lo que dice aquí, esto es bien revelador: “....aunque solamente conocía el bautismo de Juan, aunque solamente conocía el bautismo de Juan....” eso es muy revelador.

De nuevo Apolos muy fervoroso, muy activo, muy dinámico, muy ilustrado, pero no tenía la llenura, el bautismo del Espíritu Santo todavía. Por eso es que se aclara eso y mire que interesante, con esto ya… por favor sea paciente un momentito. Y dice: “… y comenzó a hablar con denuedo en la sinagoga, pero cuando le oyeron Priscila y Aquila” Priscila y Aquila eran un matrimonio muy interesante, me encanta esa pareja, porque eran gente humilde, sencilla, no muy ilustrada, pero estaban llenos del Espíritu Santo. Eran unos misioneros, yo creo que nunca habían ido a seminario ni nadie les había comisionado para misioneros pero predicaban el Evangelio.

Y yo he conocido gente así en República Dominicana, en Puerto Rico, en Latinoamérica, por todas partes, son gente ¿usted sabe? esa viejita con su moñito aquí arriba llena de canas que están llenas del espíritu y ustedes le miran la cara y saben que el fuego de Dios está en ellos aunque nunca predicaron un sermón y nunca fueron a un seminario pero conocen la presencia de Dios.

Porque eso no requiere pedigree académico ni nada, al contrario muchas veces lo académico es un obstáculo, le digo la verdad.

Y esa parejita ve a este hombre tan ilustre, tan bien instruido, tan dinámico, pero cuando escucha su predicación se dan cuenta que le falta algo, y ¿cuántas veces uno ve gente asimismo muy ilustrado? hablan de Dios en una forma elocuente y todo pero por lo que dicen y lo que no dicen usted sabe que falta algo.

Hay iglesias así, hay todo muy lindo, muy bien, muy hermoso, pero falta algo. Y Aquila y Priscila intuyeron eso, que a este hombre le faltaba… había un componente importante que necesitaba añadirse a su espiritualidad y dice entonces que “.....le tomaron aparte.....”.

Si usted quiere corregir a alguien, corríjalo aparte, discretamente. Hay mucha gente que: Ah estos no sirven, que estos evangélicos sin el Espíritu Santo y los ridiculizan, no, no, busque el momento propicio, tómelo a parte y hable con ellos humildemente, sencillamente…

“......lo tomaron aparte y le expusieron más exactamente el camino de Dios....”

¿Usted ve? le instruyeron acerca de esa otra parte que él necesitaba en su vida, y entonces ya Apolos tenía denuedo, tenía instrucción, tenía conocimiento, pero tenía también el fuego del Espíritu Santo en su vida. Imagínense.

Años después Pablo habla de un Apolos que inclusive, hay mucha gente que lo sigue a él antes que a Pablo, y dicen: nosotros somos de Apolos. Parece que Apolos había adquirido una prominencia muy grande en el Evangelio y yo creo porque fue por la unción del Espíritu Santo en su vida. Por eso usted escucha: “yo sembré, Apolos regó pero el crecimiento lo da Dios”

Apolos, yo creo que aprendió la lección y recibió lo que tenía que recibir. Esa parejita humilde, ¿cuántas veces yo me he beneficiado de gente sencilla de corazón humilde que me han ayudado a mejorarme y caminar con Dios? Yo adoro ese tipo de gente en mi iglesia, doy gracias a Dios por ellos, para que siempre estén en mi congregación porque esa gente humilde, sencilla, con unción de Dios, siempre son un ejemplo para nosotros los que hemos estudiado un poquito más y nos creemos que lo sabemos todo. Mentira, usted necesita la llenura del Espíritu Santo en su vida, eso es lo que asegura que usted va a ser efectivo en la vida cristiana.

Sin eso, sus estudios y todo lo demás, es tropiezo y obstáculo más bien, razón humana que no puede recibir ni percibir las verdades de Dios.

Hay muchos pasajes yo podría mostrarles más, el otro pasaje es el pasaje de los Efesios que también Pablo les dice: ¿recibieron ustedes el Espíritu Santo cuando creyeron? y dicen, ni siquiera sabemos, sabíamos que hay Espíritu Santo, no sabían. Y dice que Pablo impuso manos y recibieron el Espíritu Santo y hablaron en lenguas y profetizaron.

No siempre que se recibe el Espíritu Santo hay que profetizar o hablar en lenguas, pero hay algo que se siente, hay una diferencia, hay una intensidad, algo que se percibe que Dios ha tocado tu vida. Y eso es los que tenemos que buscar en nuestra vida.

Tú has entrado en el conocimiento del Señor Jesucristo pero necesitas algo más. Necesitas esa llenura del Espíritu Santo en tu vida, tú tienes que buscar eso continuamente en tu vida. Todos tenemos que buscarlo.

Yo quiero que nos pongamos de pie un momento, que quede claro hermanos, yo voy a seguir hablando de esta doctrina, pero que quede claro que tú y yo necesitamos un encuentro a diario, continuo con el espíritu de Dios, necesitamos renovarnos.

Si tu quieres tener verdadero impacto, no dependas, no dependas de la religión, no dependas de que Oh yo conocí a Jesucristo hace 10 años y ya todo está bien, no dependas de la gente, no dependas de la iglesia, no dependas del servicio, no dependas de que oren por ti, no dependas de que tu abuela era evangélica. Tu tienes que buscar tu, tu pan diariamente, si tu quieres una vida poderosa, si tu quieres un ministerio poderoso, si tu quieres que en tu trabajo haya unción de Dios, si tu quieres que tu contacto con la gente tenga unción de Dios, si tu quieres que tus problemas emocionales y mentales sean domados, tienes que buscar unción del Señor en tu vida, es la única manera.

Cuando una persona vive ávida, hambrienta de la presencia de Dios, eso se siente, y usted va a ser el primero en sentirlo y otros alrededor de usted lo van a percibir también porque es necesario, hermanos.

No quiero decir que usted anda todo el tiempo por allí alardeando, no!!! usted camina suavecito, pero el Diablo le tiene miedo porque sabe que no se puede jugar, porque ahí está la unción de Dios en usted. Hay que buscar la presencia de Dios o que Dios levante un pueblo pentecostal en nosotros, en nuestras vidas, que ésta mañana sirva para inquietarle a usted de la importancia de tener la llenura del Espíritu Santo, eso es para ti y para ti y para ti.

Dice el Apóstol Pablo, o Pedro para los que están lejos, y para los que están cerca, para todos los que el Señor llamare, aleluya. Es para el más nuevo en el camino cristiano y para el de más años en el camino cristiano. Eso tu lo puedes hacer en privado, lo puedes hacer en público, pero es necesario que tu busques la unción del Señor en tu vida.

Toma tus manos así y ponlas delante de ti, levántalas un poco en señal de pedirle al Señor, como si tu estuvieras… tu quieres que Dios ponga algo sobre tus manos, si tu le fueras a pedir a alguien algo, hazlo así en este momento, extiende tus manos hacia Señor y dile: Señor, necesito tu unción, necesito tu aceite en mi vida, refréscame, úngeme de nuevo, pon tu unción en mis manos, pon tu unción en mi corazón, pon tu unción en mi mente. Yo soy el primero que lo estoy diciendo desde acá arriba como usted ahora mismo, Señor necesito de ti.

Necesito unción fresca en esta mañana, lléname, renuévanos, renueva esta iglesia Padre. Los tiempos requieren una unción fresca, como nunca necesitamos la lluvia tardía para estos tiempos difíciles Señor en que vivimos, necesitamos que tu nos renueves y nos toques.

Espíritu Santo, que esta iglesia pueda comer hoy de tus alimentos, de tu maná, de tu mesa, y que podamos sentir Señor, la fortaleza, el ánimo fresco de haber tenido contacto contigo. Te hemos adorado espíritu, te hemos exaltado en esta mañana, visítanos y llénanos, ven Espíritu Santo, derrámate sobre tu pueblo.

Pídele al Señor que te refresque tu mente. Renuncia a una religión vana, automática, mecánica y pídele al Señor que te de la presencia del esposo, del esposo en tu vida. Gracias Señor Jesús, recibimos tu bendición en esta mañana, recibimos, recibimos más de ti Señor, más de ti. Ohh, espíritu de Dios, gracias Señor, hay un coro que dice: dame de beber de tu agua Señor, si lo tienes allí, dame de beber; Gonzalo ayúdame porque no lo conozco totalmente pero quizás tu te recuerdas de él, si lo puedes poner allí arriba, AH perfecto aquí está OK. ( canción)

Vamos a decirle Señor, dame de beber, necesito más de ti, bebe del agua del Señor en esta mañana, pídele al Señor que te llene de nuevo, sal de aquí refrescado, amén, gloria al Señor, gracias Jesús, gracias Jesús, te adoramos Señor, aleluya, aleluya. (canción)

Dame de beber, de tu agua Señor

Ya no quiero tener sed jamás.

Dame de beber, necesito más

Ya no quiero tener sed jamás

Dame agua viva

Llena hoy mi ser

Ven y sáciame con tu verdad

Quiero beber del agua de vida eterna