El poder de nuestras palabras

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Prepare su corazón ahora para recibir una impartición de la vida de Dios a través de las palabras específicamente, quiero hablar acerca de eso, de el poder de nuestras palabras, el poder de la boca, el poder de las palabras para bendecir o para maldecir, para retrasar o para avanzar nuestras jornadas, nuestras trayectorias espirituales, el poder de las palabras ¿amén?

Esto está en línea con esta serie de meditaciones que hemos estado llevando a cabo últimamente. Como ustedes recuerdan he reiniciado esa serie que pospusimos por un tiempo sobre salud emocional y sanidad emocional espiritual, cómo vivir vidas sanas saludables, cómo ser sanadores sanos porque muchas veces en el Reino de Dios queremos bendecir a los demás, evangelizarlos, hablarles de la Palabra de Dios pero nosotros mismos hay áreas que no hemos tratado sin darnos cuenta a veces o no sabiendo cómo podemos salir de los atolladeros en que nos encontramos y la Palabra del Señor tiene gran consejo para todos nosotros acerca de cómo vivir vidas victoriosas, cómo vivir vidas saludables, y cómo sanarnos de las deformaciones inevitables de este mundo caído.

Todos vamos a pasar por tribulaciones, angustias en nuestra niñez, en nuestro pasado, hemos experimentado heridas que nos han deformado, a veces entramos al Reino de Dios y venimos con deformaciones del pasado, de nuestra niñez, nuestra formación familiar hogareña, dolores que padecimos en nuestra juventud, decepciones que nos ha dado la vida, hábitos y defensas que hemos adquirido porque hemos habitado en un ambiente hostil, abuso físico que algunas hermanas han padecido en sus matrimonios, digo hermanas aunque también hay mujeres que abusan físicamente del hombre pero son menos, o abuso emocional, manipulación, otras cosas y a veces hemos desarrollado defensas contra esas cosas que son buenas quizás para subsistir y resistir un ambiente hostil pero que en el mundo normal de la convivencia normal no son buenas.

Imagínese que usted ande apuntando con un revólver todo el tiempo apuntando allí, eso es bueno si usted está en un ambiente de guerra pero si está en una calle lo van a arrestar ¿no? entonces eso es importante. ¿Cómo podemos dominar esas áreas, cómo podemos adquirir dominio sobre las cosas compulsivas, las cosas que nos esclavizan que a veces ni estamos conscientes de ellos, no? ¿cómo vivir esa vida abundante que el Señor quiere para nosotros? La Biblia está llena de sanos consejos, principios para ese tipo de vida abundante que Dios quiere.

Y hemos hablado últimamente acerca de esa idea ¿no? del creer que todo lo podemos en Cristo que nos fortalece, eso fue creo el domingo pasado, anterior a eso hemos hablado acerca de muchos otros principios, del hecho que sí, que en el mundo vamos a hallar aflicción y que viene el sufrimiento a la vida del creyente, y que conocer eso y aceptarlo es algo ya muy, muy poderoso, y muchas otras cosas así; el poder de la oración, el poder de la guerra espiritual, el poder del perdón y todas estas cosas son muy valiosas, la persistencia, la paciencia que discutimos hace dos domingos atrás, todas estas cosas son importantes que son como piezas de un armazón mucho mayor ¿no?

La paciencia y la persistencia son importantes porque muchas veces se toma tiempo la transformación y los cambios que necesitamos en nuestra vida. El creer que Dios está con nosotros y que Su Poder vive dentro de nosotros es importante porque si sabemos que no estamos solos y que tenemos un poder sobrenatural a nuestro favor que nos ayuda en nuestras luchas eso nos va a animar a seguir adelante ¿sí o no? si usted piensa que usted va a ser derrotado muy posiblemente no va a emprender una batalla, entonces estos son principios importantes para la transformación personal, el cambio en nuestras vidas.

Y este concepto que quiero aislar ahora, aunque todos se entrelazan entre todos, todos están intercalados y a veces es imposible separar uno del otro, y muchas veces inclusive hay procesos y textos en la Escritura que involucran diferentes principios simultáneamente, y al hacer una exégesis Isaías de esos pasajes vemos este, vemos el otro y somos como un científico que levanta una pieza y levanta la otra y la examina en una forma aislada, eso es lo que quiero hacer esta mañana con el poder de las palabras, es un principio que nosotros podemos usar en el proceso de la transformación personal.

Por ejemplo mire usted lo que dice Proverbios, quiero usar ese texto como punto de partida, Proverbios 18:20, ya ustedes han escuchado esa Palabra antes, dice: "Del fruto de la boca" en otras palabras la lengua, las palabras, "del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre, se saciará del producto de sus labios" los políticos conocen eso muy bien aunque Donald Trump dice que no, que él no es labioso pero no quiero meterme en política así que no quiero pisar callos de nadie acá ni nada, voy a callar, Señor que mis palabras sean constructivas esta mañana.

Pero ciertamente hay mucha gente que vive de las palabras: los maestros, los profesores universitarios, los filósofos, y lo que está diciendo el escritor acá es que sí, la forma en que una persona se expresa, en la universidad nos enseñan cómo usar las palabras correctamente en una composición, en un reporte, en una presentación oral, verbal, las palabras son poderosísimas y una persona puede llenar su vientre, en otras palabras devengar su salario, devengar su vivencia y su sostenimiento de sus palabras, y según una persona habla y se expresa hay personas que tienen una gracia para hablar que van a una entrevista y reciben el trabajo inclusive aunque no estén calificados pero impresionan con su gracia a un posible empleador, entonces lo que está diciendo el escritor de Proverbios es que del fruto de la boca del hombre se llena su vientre y se saciará del producto de sus labios.

Si nosotros aprendemos a hablar con gracias como dice la Biblia: "Toda palabra sazonada con sal" palabras alegres, agradables, acertadas, sobrias. Si nuestra conversación proyecta sanidad emocional eso puede afectar nuestra vida de empleo, nuestras relaciones personales y una cantidad de cosas. Lo que está diciendo específicamente aquí es que las palabras de la boca del hombre, de la mujer puede afectar mucho y por eso es tan importante que nosotros aprendamos del poder de las palabras, que modulemos las palabras, a veces algo tan sencillo como uno modular sus conversaciones. ¿Qué quiere decir modular?

A veces uno habla como en un mono-tono ¿no? así así bien aburrido, no, uno debe variar el tono y aprender hasta que eso se convierta en algo automático que lo hacemos sin darnos cuenta pero eso tiene poder, tienen efecto, poner el énfasis en una palabra específica, hablar más lentamente cuando hablamos, que nuestras palabras, enunciarlas. A veces nos acostumbramos a que: la gente se encargará de descifrar lo que yo digo no te preocupes, y decimos ahí 17 cosas en un segundo y ya ellos se encargarán de saber lo que yo estoy diciendo. No, vamos a hablar pausadamente.

Los gestos que usamos cuando hablamos, si miramos a la gente a los ojos. Todas estas cosas tienen una influencia tremenda y afectan el mensaje que queremos dar. Así que usted no tiene que ser un locutor para aprender a modular sus palabras, hablar más lentamente y aprender el uso de diferentes técnicas de comunicación que ayudan en todos los aspectos de la vida y que pueden determinar su prosperidad o no, entonces por eso es que el escritor dice: "Del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre y se saciará del producto de sus labios." Parece muy mecánico ¿no? muy físico, el vientre se llenará, pero está hablando de la prosperidad que viene de adquirir un buen dominio de las palabras.

Pero entonces aquí está el texto más importante de todos, el versículo 21 dice: "La muerte y la vida están en poder de la lengua" wow, "y el que la ama comerá de sus frutos." La muerte y la vida están en poder de la lengua. ¿Cuántas personas están hoy 6 pies bajo tierra porque hablaron mal en una barra o insultaron a alguien, o se dirigieron en una forma irrespetuosa a un policía y eso desencadenó.

Hace poco estábamos viendo uno de estos casos terribles que ha habido últimamente de abuso policíaco, de acusación de abuso policíaco que me muestra claramente que uno de los problemas está a veces en que, si un policía, un patrullero le para en un highway ese policía está entrenado a venir con todas las defensas hacia arriba, inclusive se acerca a veces con la mano puesta en el revólver porque los entrenan así, no sabe quién está dentro del carro, si esa persona va, y si usted desde el principio habla de una forma irrespetuosa o agresiva ya de ahí comenzó un deterioro en esa relación. Puede que lo que usted dijo esté perfectamente normal o digamos aceptable, que no viole ninguna ley pero ya usted está montando el armazón para una posible confrontación innecesaria en vez de usted bajar la guardia enseguida con una palabra irrespetuosa: "buenos días oficial ¿en qué puedo servirle?" o lo que sea ¿no?, "no sabía que estaba, ¿qué pasó, quiere saludarme quiere darme un café?"

Pero hay que ser respetuosos, hay que respetar la ley. Hay un texto que dice que: "Las palabras mansas ablandan la ira" o algo así. Una persona viene llena de ira y cosas y usted le da una palabra suave óigame, y se desinfla, usted casi puede ver el cuerpo relajarse así completamente, ponerse mongo, no esperaba eso; ahora si usted le contesto con otra palabra.

En el matrimonio es así también ¿no? a veces ella, es ella normalmente la que (ríe), está de mal humor o lo que sea y le dice algo y usted, es como cuando los bates ¿no? los muchachos, ¿quién va a batear primero? y tiran el bate, la agarran por acá y el otro pone la mano acá y el otro por acá, cuando viene a ver no queda nada para agarrar, y a veces ella dice algo o él dice algo, usted dice algo un poquito más caliente, él dice algo un poquito más caliente y cuando vienen a ver se están quemando los dos y la casa completa también por una palabra que debió haberse.

A veces terribles situaciones se pueden desarmar, se le puede quitar la mecha a una bomba en un instante con una palabra atinada, las palabras son poderosas. Por eso es que creo que el escritor dice aquí: "La muerte y la vida están en el poder de la lengua", definitivamente.

El escritor de Santiago, Santiago el apóstol, habla acerca de la lengua y sus palabras aunque son muy negativas, yo no quiero hablar solamente de lo negativo, en realidad ni siquiera quería pasar mucho tiempo en ese texto pero es maravilloso, el texto sobre la lengua en el capítulo 3 de Santiago, léalo después a su tiempo, pero él dice que la lengua es un miembro muy pequeñito, aunque para algunos hermanos y hermanas es más grande (risas), no pesa más de media libra; en algunos pues es más sustanciosa definitivamente.

Pero dice el apóstol Santiago que la lengua "es un miembro muy pequeñito pero se jacta de grandes cosas", dice: "he aquí cuán grande bosque enciende un pequeño fuego" y es cierto. Una sola palabra puede desatar una conflagración mundial y dice: la lengua está puesta entre nuestros miembros y es cierto. Fíjese que está puesta como entre nuestro cerebro y el cuerpo ahí como dirigiéndolo todo ¿no? y la lengua está en el centro de nuestros miembros "y contamina todo el cuerpo e inflama la rueda de la creación" Santiago se puso bien poético ahí, inflama la rueda de la creación, puedo casi imaginarme esa imagen que él da aquí ¿no?

Pero entonces habla acerca de eso, la importancia, de que de la boca de un cristiano no puede salir maldición y bendición. Él dice: ¿cómo puede una fuente verter agua dulce y agua amarga, agua venenosa y agua bebible? no, no se puede, debe ser una sola o la otra, debemos tener mucho cuidado con las palabras, es difícil pero tenemos que aprender la importancia.

Yo creo que el primer momento de esta meditación es hacernos conscientes de que las palabras no son neutrales, las palabras no son inofensivas en sí, no, las palabras son armas, son instrumentos que pueden operar o matar, pueden sanar o pueden enfermar, las palabras tienen gran poder.

Hay una conexión directa entre la calidad de nuestra vida, nuestros sentimientos, nuestro espacio interior y las palabras que circulan alrededor de nosotros que continuamente oímos y que pronunciamos en nuestra conversación. Recuerde que todo lo que usted escucha y lo que dice, las palabras que resuenan a su alrededor en su sitio de trabajo, en su casa impactan su vida.

Una de las cosas que yo más resiento hermanos de la vida moderna es que hoy en día hay muy pocos espacios en donde usted puede tener silencio. ¿Sabe que? una de mis quejas favoritas es que cuando yo voy a los aeropuertos hay ruido dondequiera, tú estás sentado y hay una bocina directamente encima de ti y una pantalla enseñándote el último atentado terrorista y usted se va a montar en un avión, imagínese. Yo agradezco, en Europa es diferente, todavía no ha invadido, allá los aeropuertos son bastante silenciosos normalmente.

Aquí en Estados Unidos usted va a un restaurant y usted no encuentra una mesa donde usted no esté viendo una bendita pantalla hermano. A veces yo quiero ponerme en una pared y en la pared misma ahí está la pantalla, y usted va a los restaurantes hoy en día y hay 17 pantallas con 14 juegos y las últimas 3 novelas de la televisión, y pantallas por donde quiera, movimiento, ruido y eso afecta a los seres humanos, uno necesita silencio, necesita quietud también, y todas esas cosas van afectando. Entonces los ambientes y las palabras que nosotros circulamos y procesamos afectan el estado espiritual, lo que hablamos, lo que decimos, nuestra conversación, eso es importante que entendamos. Nuestras palabras y nuestros silencios importan, por eso tenemos que medir nuestras palabras como un recurso precioso, a veces olvidamos esto y desperdiciamos energía.

Yo mido a veces la sabiduría de una persona por cuántas palabras consume y produce en diez minutos. Hay gente que usted se sienta y usted no tiene que decir una sola palabra, usted solamente aprieta un botón y ellos hablan por usted, usted no tiene que decir nada y de vez en cuando usted dice "uh hum" y ellos tienen fuerza para seguir veinte minutos más hablando (risas). A veces eso es una ventaja tremenda ¿no? porque usted nada más se sienta allí, piensa en el tiempo y en las otras cosas y de vez en cuando se recuerda y dice "uh hum" y ellos siguen hablando, y usted no tiene que hacer nada en la conversación.

Pero ¿sabe qué? dice la Biblia que los sabios guardan silencio. Dice que en las muchas palabras hay necedad. De paso como Pastor tengo la mala cosa de que tengo que hablar todo el tiempo porque siempre uno va a decir, alguna necedad se le va a escapar, imagínese hablando cuarenta minutos no se le va a escapar uno un algo que va a ofender o que después uno dice: óyeme; mi esposa se encarga siempre al final del día de decirme las cosas que no dije bien, allá tengo una fiel, fiel interpretadora (ríe), no, estoy jugando, no es cierto.

Pero ciertamente en las muchas palabras hay necedad y una de las cosas que tenemos que aprender es eso, que sus palabras sean medidas, sean sopesadas y que la gente se acostumbre a saber que si usted dice algo ellos pueden ir al banco con eso. Usted no tiene que estar jurando: (besa la mano) te juro por Dios que tal y tal cosa, generalmente eso quiere decir que usted no confía en usted mismo ¿sabe? y piensa que tiene que gritar para que le crean. La gente que anda jurando por ahí todo el tiempo eso quiere decir que tiene una consciencia culpable ¿no?

Ahora la persona que habla seriamente y que sus palabras tienen peso la gente sabe que no tiene que estar diciendo: no te aseguro que, te juro que, por mi madre qué se yo que, no, la gente sabe. Si él dice eso o ella dice eso, despreocúpese. Aprenda a prometer poco y dar mucho en vez de lo contrario. Gente que le prometen el cielo y la tierra, son unos titanes, unos gigantes, se comen a los niños crudos y después cuando llega el momento de dar todo se desaparece, no. Dé más de lo que usted promete, sea más de lo que usted parece, accione más de lo que usted habla y guarde sus palabras y mídalas cuidadosamente porque son energía, las palabras son energía. Si usted gasta su energía, las palabras son como dinero, si usted lo gasta a manos llenas no tiene nada al final.

Las palabras usted las guarda por dentro y son energía que circula y le da tensión a su barco, wow qué lindo salió eso, y cuando usted dispara dispara con fuerza y efectividad, y las palabras dan en su blanco. Mientras uno más guarda silencio más presión interna acumula y más fuerza tiene uno en la vida, por eso es que siempre los sabios se asocian con el silencio, porque saben el valor del silencio y de las palabras también.

La Biblia habla de palabras ociosas de paso. Para mí palabras ociosas son esas palabras que no las hemos medido, no las hemos meditado, simplemente salen automáticamente por inercia, como que prendimos el botón al subconsciente y salieron las palabras y no las meditamos antes.

Dice el Señor Jesucristo, mire esto qué interesante, en Mateo capítulo 12 dice: "Haced del árbol bueno y su fruto, bueno, o del árbol malo y su fruto, malo, porque por el fruto se conoce el árbol" y entonces dice: "Generación de víboras, ¿cómo podéis hablar lo bueno siendo malos?" generación de víboras". A veces la gente me oye a mí y me dice: Pastor Miranda parece que usted está de mal humor pero mire cómo hablaba el Señor Jesucristo, "generación de víboras", si yo hablara así me sacarían de aquí a patadas.

"¿Cómo podéis hablar lo bueno siendo malos? porque de la abundancia del corazón habla la boca" usted sabe lo que hay en el corazón de una persona por la calidad de sus palabras de su conversación. "El hombre bueno del buen tesoro del corazón saca buenas cosas, y el hombre malo del mal tesoro saca malas cosas" y esto para mí es una sentencia muy fuerte: "Mas Yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ellas darán cuenta en el día del juicio, porque por tus palabras serás justificado y por tus palabras serás condenado" wow. Yo podría usar eso solamente para el resto del sermón pero tengo tantas cosas que quiero compartir con ustedes, pero medite eso. Vaya a su casa, apunte ese texto, pídale al Señor que le dé sabiduría.

Wow, hay cosas que en el Día del Juicio ¿cuántas veces hemos dañado el corazón de un niño por una palabra que le dijimos y se quedó allí circulando en su espíritu, y cuando viejo todavía no se ha olvidado de esa palabra condenatoria que se le dió? ¿hm? ¿cuántas veces hemos herido a un esposo, una esposa por una palabra terrible que hemos dado a ellos? se ha quedado como una presencia sombría, siniestra en su corazón y yo creo que sí, un día vamos a tener que dar cuenta de esas cosas porque creamos un ser amargado y hasta violento y que hizo daño a otros, así que esa palabra se multiplicó en esa persona e hizo gran daño. Por eso es que el Señor dice que tendremos que dar cuenta de esas palabras ociosas que hemos hablado.

Para cambiar hábitos depresivos, aquí entra también eso de lo positivo de las palabras, para cambiar hábitos depresivos y derrotistas por ejemplo, y cambiar actitudes negativas en nosotros mismos tenemos que cambiar las palabras que continuamente pronunciamos y oímos.

Si usted quiere tener una vida saludable, si usted quiere cambiar en alguna actitud negativa, derrotista, depresiva en su vida, a veces inclusive ansiedades y otras cosas una de las maneras. A veces usted no va a poder sanar la ansiedad de la noche a la mañana, usted no va a poder afectar directamente la depresión en su vida, pero usted puede comenzar cambiando la manera en que usted habla porque es muy fácil, y esto es importante. A veces tenemos que hablar por fe aunque no lo sintamos sabiendo que al nosotros hablar por fe y hablar positivamente eso va a tener un impacto sobre nuestro estado interior, y poco a poco va a ir cambiando nuestra actitud.

Usted quizá no puede cambiar su actitud pero puede cambiar su forma de hablar ¿no? de vez en cuando diga algo que sea positivo, algo que refleje esperanza. Si usted padece de depresión o de negatividad diga: no, yo puedo hacer esto y yo creo que va a salir bien, no estoy seguro y parece lo contrario pero yo creo que de alguna manera Él va, si no cojo el empleo Dios me va a conseguir algo mejor, dígalo aunque no lo crea pero dígalo positivamente y eso va a ir cambiando poco a poco la forma en que usted piensa.

Si usted se mueve, y déjeme conectar eso un poquito más ¿no? lo que pronunciamos, lo que decimos puede cambiar en otras palabras nuestros sentimientos, nuestro espacio. Si usted por ejemplo está siempre consumiendo palabras negativas, sonidos negativos eso afecta su espacio interior. Por eso es que si usted trabaja en un lugar donde la gente es quisquillosa, conflictiva, murmuran unos de los otros, hay lugares así y donde la gente es negativa porque se crea una negatividad en el aire y eso tiene que ver muchas veces con los valores de una institución, los jefes que están en la institución y muchas otras cosas pero a veces habitamos en ese ambiente y claro, nosotros mismos vamos a expresar eso en nuestra actitud.

Es como si usted trabaja en un lugar donde todo el mundo fuma olvídese que cuando usted salga de allí usted va a oler a lobby de hotel barato porque su piel y la tela de su traje va a oler, y así pasa con las palabras que consumimos también ¿no?

George Orwel, un escritor muy famoso, dijo lo siguiente: "Si el pensamiento corrompe el lenguaje, el lenguaje también puede corromper el pensamiento." En otras palabras: ciertamente la manera en que usted piensa determina la manera en que usted habla y si una forma negativa de pensar da luz a un lenguaje negativo, de la misma manera si usted cambia su lenguaje y cambia sus palabras poco a poco ese lenguaje positivo que usted comience a hablar va a tener un impacto sobre su forma de pensar.

La clave creo que está en la forma en que funciona el cerebro. Hoy en día los estudios que se han hecho sobre la neurología humana, sobre el cerebro nos ha dado mucho entendimiento de cómo nosotros podemos operar sobre nuestra configuración electrónica para cambiar nuestras actitudes y cosas. Hay una equivalencia muy grande entre la cablería física del cerebro, el cerebro es una cosa terriblemente compleja, y el comportamiento, y los sentimientos de la persona. Entonces eso nos da una idea de por qué es importante hablar positivamente, porque lo que nosotros hablamos continuamente se convierte en presencia física en la neurología del cerebro, porque el cerebro va desarrollando conexiones y asociaciones, así que el cerebro crea memorias y crea sentimientos y actitudes, y carácter, y todas estas cosas, él va tirando líneas químicas que se convierten en presencias bioquímicas en esta cosa maravillosa que se llama el cerebro humano.

Entonces cuando usted habla, si usted habla negativamente continuamente esos vocablos negativos van convirtiéndose, el cerebro como que va haciendo depósitos químicos neurológicos en sí mismo, y ya eso va entonces convirtiéndose en una presencia física, ya no meramente palabras, se convierte en una presencia física. Yo creo que uno de los problemas al nosotros no entender lo complicado que es eso es no comprender que lo que nosotros decimos, tiene un equivalente físico en el cerebro, y por eso es que tenemos que tener mucho cuidado en los hábitos que cultivamos también, porque si usted cultiva un mal hábito también, sea físico, sea lo que sea, eso va estableciendo presencia en su neurología, y entonces romper con ello requiere casi como una sanidad física.

La gente no entiende eso pero no quiero hablar mucho más porque no quiero aburrirlos con eso. Pero es importante que entendamos que la forma en que hablamos se convierte en presencia neurológica y eso afecta nuestro comportamiento y la manera en que vemos el mundo y los sentimientos que sostenemos. A lo largo del tiempo las palabras se convierten en una presencia física y viven, habitan literalmente dentro de nosotros.

Otra cosa que nos ayuda entender es que Dios crea y Dios creó por medio de las palabras. Dijo Dios: "Sea la luz" y fue la luz. ¿Usted sabe que Dios es tan económico que no tiene que ponerse allí a fabricar luz o fabricar átomos de luz? no. Él simplemente dice: Sea la luz y boom, es la luz, surjan pájaros que pueblen los aires y de momento puf, yo quisiera tener ese poder ¿y a usted qué le parece? un millón de dólares Señor ahora aquí, boom, un lexus del año. Pero Dios crea a través de Su Palabra y Dios dice las cosas, Él no tiene que estar peleando con nadie ni nada, Él simplemente da una orden y esa orden simplemente se convierte en una presencia eterna que nadie puede deshacer. Dios crea y actúa por medio de Su Palabra y sabe que nosotros que hemos sido hecho a imagen y semejanza de Dios tenemos ese poder creativo en grado menor.

Por eso es que los novelistas y los poetas pueden crear cosas maravillosas, universos que uno puede habitar en una novela, por ejemplo una canción, un poema, porque las palabras tienen un gran poder. Y ¿sabe qué? que cuando nosotros entramos en los caminos del Señor más poderosas se hacen las palabras. Lo que decimos, lo que profetizamos, el poder profético del hijo de Dios, lo que usted habla.

A veces sin darse cuenta lo que usted le dice a sus hijos: "ya yo te veo en la cárcel dentro de diez años si tú no cambias tu comportamiento" eso tiene un poder profético terrible, "muchacho tú vas a terminar muerto en un carro en una carretera si" ¿no? todas esas cosas, tenga cuidado. "Tú no sirves para nada, siempre estás, eres un inútil" tenemos que desterrar esas palabras porque sepa que no está solamente afectando psicológicamente, emocionalmente a su hijo sino que está tirando muerte sobre su espíritu y está avivando cosas terribles en su vida y declarando cosas negativas sobre la vida de un hijo o de un esposo, o de un amigo. Así que sepa que nosotros tenemos un poder misterioso que hemos heredado de nuestro creador y sobre todo cuando estamos en el Reino de Dios se ha activado ese poder profético que nosotros tenemos, la manera en que hablamos, en que confesamos con nuestra boca tiene un poder muy grande y por lo tanto entendamos, wow.

De momento cuando tú eres un hijo de Dios tú has adquirido peso y ya no puedes andar por ahí como un mamarracho de esos, como un sinvergüenza, no, tú eres un hijo de Dios y tus palabras pesan. Si Obama dice que tiene un dolor de cabeza en televisión olvídese que el Wall Street tiembla y las acciones caen porque Obama dijo que le dolía la cabeza, porque hay poder. Si el Papa dice algo aunque sea sencillo, "tengo dudas acerca de mi salvación" enseguida 500.000 católicos se suicidan ¿no? es decir: hay que tener cuidado porque mientras usted más ocupa, y eso podría ser una palabra ociosa de mi parte perdónenme (ríe), es lo que les digo que hablar demasiado es un peligro terrible hermanos; uno se enamora de su propia retórica y comienza a hablar tonterías, y cuando viene a ver: ¡Pastor Miranda baje de allí! (ríe), me voy por los aires por allá.

Pero mientras importancia espiritual usted tiene más cuidadoso tiene que ser con sus palabras, mientras más influencia ejerce en un ambiente más cuidadoso tiene que ser. Si usted está dando consejería, enseñando en una clase de discipulado, lo que sea, dando consejería en un momento así íntimo con una pareja, mida sus palabras, mucho. Si está aconsejando un hijo o lo que sea, wow mis palabras tienen importancia, Señor dame sabiduría, inmediatamente cúbrase con la sangre de Cristo. Alguien viene y dice: quiero compartir algo contigo que me está, en ese momento: Señor dame sabiduría para aconsejar a esta persona, encomiéndese porque es un momento sagrado y usted tiene poder en ese momento para construir algo constructivo o algo que confunda y cree más ansiedad de la que había inicialmente.

Entonces tenemos ese poder porque Dios lo tiene y nos lo ha legado a nosotros. Recuerde que Dios le dijo a Moisés: Háblale a la roca, no le dijo: coge un drill y métele un hoyo allí para que salga agua de ella, no, le dijo: Háblale a la roca, porque era Dios quien le estaba dando la autoridad para decir cosas, proferir, y Moisés lo que hizo fue que cogió un palo y le pegó a la roca, y perdió la oportunidad hasta de entrar a la Tierra Prometida. Dios le dijo: Háblale, no la tienes que golpear, es que hay un poder increíble en el hijo de Dios, puede abrir caminos donde parece que no hay ninguno.

Cuando llegamos a entender el poder de las palabras esto puede revolucionar nuestras vidas. Si algo yo puedo lograr en esta meditación es enviarlo con ese sentido de asombro y de respeto sumo a ese órgano que usted tiene allí de la lengua y de su boca, y los productos que produce, y que caminemos con mucho respeto, puede revolucionar nuestras vidas. Las palabras son un instrumento muy poderoso para creación o para destrucción, si les reconocemos su valor inherente se pueden convertir en un poderoso instrumento para nuestro progreso personal.

Una de las maneras de cambiar nuestras actitudes y comportamientos por lo tanto es cambiando la forma en que hablamos y ya les he dicho que hay que hablar positivamente aunque nuestras palabras no reflejen lo que verdaderamente sentimos. Por ejemplo una persona dice: yo no puedo perdonar porque lo voy a perdonar cuando lo sienta, y ahora mismo yo no lo siento y no quiero ser hipócrita, entonces usted se queda ahí aplatanado en el resentimiento.

¿Sabe qué? perdone simplemente en obediencia. Aunque usted quiera ahorcarlo si lo ve diga: lo perdono, lo perdono, y diga eso como una oración de fe al Señor y al diablo mismo también, diga: perdono en el Nombre de Jesús. Y aunque usted todavía no haya sentido eso es en sus emociones, el hecho de usted pronunciar esa palabra de perdón va a romper en usted algo ¿sabe? comience simplemente por un acto de fe. El perdón es un acto de obediencia, el perdón no es algo emocional necesariamente, usted simplemente está usando sus palabras para declarar, así como hay una sentencia que se declara verbalmente también hay una declaración de perdón y de gracia que se da a través de las palabras y después vendrá poco a poco la parte emocional, y los sentimientos se unirán a las palabras.

Déjeme ya terminar y si tú quieres subir para que tengan esperanza Omar sube un ratito acá y acompáñame allí, todavía me quedan 20 minutos por si acaso, 19 con 25, 24, 23 segundos, 22, 21. Algunas aplicaciones prácticas acerca de las palabras. Uno: ya les señalé la importancia de bendecir a nuestros hijos en vez de hablar cosas negativas acerca de ellos o de ellos, recuerde: siempre bendiga a sus hijos. Mi esposa a nuestras dos hijas siempre les leía o les pronunciaba las palabras de Aarón: Jehová te bendiga y te guarde, Jehová haga resplandecer Su Rostro sobre ti y tenga de ti misericordia. Jehová alce Su Rostro sobre ti y te dé paz, y ellas decían: ¡paz! Esas palabras yo sé que están ahí nadando en su espíritu aún ya cuando son adultas.

Las palabras de bendición son tremendas y nosotros debemos bendecir a nuestros hijos, debemos hacerles creer que pueden y decirles: tú eres un triunfador, tú vas a hacer grandes cosas, estoy orgulloso de ti, tú eres bueno, muy bonito ese dibujo aunque sea horrible pero qué lindo te quedó, hable por fe, quién sabe si un día se convierta en un Miguel Ángel, es posible pero bendiga y afirme ¿no?

Otro, la importancia de hablar positivamente acerca de los demás en vez de proferir continuamente palabras críticas acerca de ellos. Hable bien de la gente aunque sean unos sinvergüenzas, hable bien de sus hermanos, acostúmbrese a hablar positivamente. Hay gente que siempre están criticando, siempre diciendo lo malo de la gente. ¿Usted no cree que eso va a afectar su panorama interior?

Acostúmbrese a decir algo bueno, si hay algo bueno en esa persona dígale: mira que lindo está ese botón de tu traje aunque el traje sea horrible, pero el botón, concéntrese en el botón por lo menos. Wow qué nariz más interesante tú tienes, lo que sea pero hable, hable cosas positivas, afirme las cosas positivas en la persona, no seamos criticones, no seamos murmuradores, hablemos positivamente acerca de los demás ¿no?

Es importante afirmar a la gente también ¿no? la gente necesita una palabra de afirmación de vez en cuando. Busque alguna excusa, alguna razón para decirle algo positivo a esa persona y animarle a seguir adelante en ese esfuerzo que está haciendo en vez de señalarle solamente las faltas. También es importante hablar acerca de los proyectos que nosotros emprendemos, hablar con esperanza, hablar con expectativa de que vamos a tener éxito expresando palabras de que esperamos buenos resultados de lo que estamos emprendiendo.

Cuando David se enfrenta con Goliat y Goliat le dice: tú eres un renacuajo ¿cómo te atreves a venir delante de mí? en vez de meter la cola entre las piernas e irse derrotado y triste mire cómo le dice David a Goliat, dice: "Entonces David dice al filisteo: tú vienes a mí con espada, y lanza, y jabalina, mas yo vengo a ti en el Nombre de Jehová de los Ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel a quien tú has provocado. Y mire cómo profetiza David acerca de ese momento y que él no sabía decir, todo indicaba que el resultado iba a ser desastrozo: un niñito obesito sin experiencia de guerra contra un gigante experimentado en la guerra armado hasta los dientes y él solamente con una jabalina allí y un palo.

Pero mire cómo dice David, dice: "Jehová te entregará hoy en mi mano y yo te venceré, y te cortaré la cabeza, y daré hoy los cuerpos de los filisteos a las aves del cielo y a las bestias de la tierra, y toda la tierra sabrá que hay Dios en Israel, y sabrá toda esta congregación que Jehová nos salva con espada y con lanza porque de Jehová es la batalla, y Él os entregará en nuestras manos." Wow, gloria al Nombre del Señor.

Si yo fuera un productor de cine yo pondría a David en ese momento como cada vez que dice algo, va creciendo, va creciendo, va creciendo hasta que se convierte en un gigante más alto que el mismo Goliat. Él está pronunciando esas palabras porque él cree. Quizás hasta ni creía pero tenía que darse ánimo de todas maneras. Está diciendo: yo te voy a hacer esto, yo te voy a hacer lo otro y cuando él decía eso más se crecía su valor, y así es que nosotros tenemos que hablar.

Cuando emprendamos un proyecto difícil y poco prometedor hable positivamente en el Nombre del Señor, aunque usted sienta temor, acostúmbrese a decir algo positivo. No quiere decir que usted no entienda la complejidad y la dificultad de lo que está emprendiendo pero usted decide bendecir en vez de decir algo que sea derrotista, acostúmbrese a hablar de proyectos en su vida en manera que refleje expectativa positiva.

La importancia de expresar gratitud a Dios cuando oramos y de señalar las cosas buenas que hay en nuestra vida, esto quita la mirada de lo negativo y lo que no tenemos, y lo pone sobre las cosas buenas que sí tenemos en nuestra vida. Nunca termine una oración sin darle las gracias a Dios por algo, por algo que usted esté esperando. El apóstol Pablo dice ¿no? "Por nada estéis afanosos sino sean conocidas todas vuestras peticiones con toda oración y ruego con acción de gracias" ¿por qué? porque usted le está dando gracias a Dios por lo que Él va a hacer.

Dice ese coro: "Te agradezco por todo lo que haz hecho, por todo lo que haces y todo lo que harás" wow, está cubriendo ahí todas las bases. Usted tiene que, cuando ore al Señor ore con gratitud, "Padre: te doy gracias porque yo sé que Tú vas a hacer esto, vas a hacer lo otro, Tú me vas a bendecir, gracias porque nunca me has dejado en derrota, nunca me has dejado en vergüenza.

Si tú pronuncias gratitud eso yo creo que se convierte en endorfinas y en otros químicos que te inspiran tranquilidad y paz, aprende a expresar gratitud al Señor y a otros también. Si alguien hizo algo bueno por ti dale gracias, envíale una tarjeta, reconoce lo que han hecho. La gratitud es un sanador tremendo y nuestro panorama interior también se va endulzando con expresiones de gratitud.

Otra cosa: la importancia de hacer lecturas en nuestra vida, de leer continuamente la Palabra de Dios. Dice Jeremías: "Comí tus palabras y fueron dulces en mi boca." Lea continuamente la Palabra del Señor, lea buenos libros, lea buenas novelas, lea buenos poemas, no tienen que ser cristianos. Hay mucha poesía y literatura secular con valores tremendamente hermosos, es más: a veces los escritores seculares son mejores que los escritores evangélicos muchas veces, y entonces santifíquelos y cristianícelos, pero haga buenas lecturas.

Vea buenos programas de televisión en vez de llenar su cabeza de alitas de cucaracha ahí con que fulanita se casó con el hermano y lo descubrió diez años después, y la mamá se tiró, ¿qué bueno va a sacar usted de eso? controle lo que usted consume. Un cristiano debe estar usando bien el tiempo y consumiendo las cosas que añadan a su crecimiento personal ¿no?

Escuche música de calidad que afirme sus valores espirituales en vez de llenar la cabeza de energías y deseos negativos, eso es un problema que yo tengo, a mí me encanta la poesía. Hace poco descubrí dos cantantes maravillosos, no lo apunten allí porque ya yo los conozco, pero son dañinos para la sensibilidad de uno, Joaquín Sabina no sé cuántos lo han, ¿hay alguien que conoce a Joaquín Sabina? si alguien levanta la mano es un genio, ¿tú? quiero hablar contigo al final del servicio (risas). Es un español exquisito, ajá, te estás confesando, esto es como hacer llamamiento, nadie quiere levantar la mano pero después todo mundo la levanta.

No, lo descubrí hace poco en el internet, genial su voz, su poesía, todo. René Pérez de Calle 13 de Puerto Rico lo escuché escuchando a Mercedes Sosa hace poco, y dije: wow este tipo es un genio poético. Pero ambos a pesar de que tienen una calidad tremenda en su música, los valores espirituales que reflejan y que expresan, el tipo de actitudes que ellos encarnan en su música no son los valores que yo debo cultivar como cristiano y sobre todo como Pastor. ¿Para qué quiero yo saber sobre las conquistas románticas de Sabina en la cama o lo que sea, qué va a hacer eso en mi mente hermanos? bastante tengo yo con los demonios que tengo en mi mente para añadir otros más.

Entonces hum, yo tengo que coger esas cosas y ponerlas a un lado y decir: ¿sabes qué Señor? te las ofrezco como un sacrificio vivo, santo, agradable, santo a Ti, no son cosas buenas para mi salud emocional. Cosas negativas, suicidas, violencia, crítica de la autoridad, crítica de Dios, del cristianismo, ¿para qué quiero yo eso aunque sea genial e interesante? por eso tenemos que tener mucho cuidado de nuestros hijos también, la música que ellos consumen.

Mire si su teenager ya se acostumbró a escuchar rap y todo eso, y va a provocar una guerra nuclear cuando usted se lo prohíba, pero sus niños pequeñitos no los deje entrar en esa porquería contra la mujer. Violencia contra la mujer, sexualidad desaforada, crítica de la policía, del gobierno, de la Iglesia, ¿para qué quieres usted eso? ¡no es es simplemente beat y qué sé yo qué, qué sé yo cuánto! no, eso es energía espiritual. La música es energía espiritual, por eso es que adoramos a Dios con la música.

El diablo, Lucifer era un músico tremendo ¿sabe eso? lea la Biblia. Cuando Dios lo creó como ese ser perfecto le entregó música a Lucifer, óigame y cómo usa el diablo la música en este tiempo, él es un músico exaltado ¿sabe? pero refleja su espacio emocional interno que es horrible, no hay gracia ni vida en esa música que él produce. Entonces estos son hábitos, son cosas muy importantes, hay mucho ahí que podemos.

Termino simplemente con esas sugerencias prácticas acerca del poder de las palabras. Les dejo con un texto de Jeremías capítulo 1 versículos 4 al 9, yo titularía este texto: No digas, no digas.

Jeremías 1:4 al 9 dice: "Vino pues Palabra de Jehová a mí diciendo:" Jeremías un jovencito, Dios lo llama, tiene grandes cosas para su vida, "vino pues Palabra de Jehová a mí diciendo: Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones." Mire las buenas intenciones que tiene Dios con este joven.

Le dice: Yo te santifiqué, Yo te preparé, te creé antes de la creación del mundo, antes que tú nacieras para ser un profeta a las naciones. Y aquí está la clave en el versículo 6, dice: "Y yo dije" lo que dice Jeremías cuando Dios le habla de ese gran sueño que tiene para Él y ese gran propósito para el cual lo ha creado, Jeremías dice con sus palabras: "Ah Señor Jehová, he aquí no sé hablar porque soy niño" Señor ¿cómo es posible que yo tenga esas grandes cosas? ni siquiera sé hablar, lo mismo que le dijo Moisés a Jehová en el desierto, soy tartamudo, no sé hablar.

La gran visión que Dios tiene para él Jeremías la contradice con una confesión negativa mirando lo negativo que hay en él: es niño, no sabe hablar, es inexperto, pero fíjese lo interesante de este pasaje, es que a esa confesión negativa y a ese: yo dije, en el versículo 7 dice: "Y me dijo Jehová" el yo dije es contrapuesto por el "dijo Jehová".

Y Jehová le dice: "No digas soy un niño porque a todo lo que te envíe irás tú y dirás todo lo que te mande, no temas delante de ellos porque contigo estoy para librarte dice Jehová; Y extendió Jehová su Mano y tocó" ¿qué? "mi boca" con mi boca, "y me dijo Jehová: he aquí he puesto mis palabras en tu boca. Mira que te he puesto hoy día sobre naciones y sobre reinos para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar."

Váyase con esa Palabra en esta mañana en el Nombre del Señor. No digas: yo no puedo, no digas: yo no tengo, no digas: yo no sé, no digas: es imposible porque todo lo que Dios te ha dicho que va a suceder en tu vida va a suceder en el Nombre de Jesús. Las buenas intenciones que Dios tiene para ti se van a dar, Dios ha puesto en tu boca poder para crear, edificar, arruinar, plantar, crear, sanar, bendecir, dar vida, todo eso está en ti por el poder de tu confesión. Cree en el Nombre del Señor y usa tus palabras constructivamente, úsalas para transformación, úsalas para bendecir este mundo, tú eres un profeta de Dios, usa tus palabras sabiamente y usa esa vida de Dios que está dentro de ti.

Baja tu cabeza un momento, recibe el llamado de Dios para tu vida en esta mañana, vamos a cambiar nuestra forma de hablar, vamos a cambiar las confesiones que salen de nuestra boca, yo quiero que el Señor me ayude a ser cada vez más cuidadoso y más dulce en la forma en que yo hablo, le pido al Señor que comience conmigo.

¿En qué áreas de tu vida verbal Dios tiene que trabajar? Si Dios te ilumina algo ahora mismo entrégale eso al Señor y hazte una promesa de que hoy en adelante vas a usar tu boca como ese instrumento poderoso que es. Si has criticado a alguien, si te has quejado innecesariamente de algo de Dios prométete que vas a hablar positivamente, vas a bendecir.

Padre: recibimos de Ti nuevas fuerzas para la transformación personal. Gracias porque nos has hecho increíblemente poderosos en el uso de nuestras palabras: Confesamos en esta mañana que Tú nos has bendecido, nos has enriquecido con toda bendición espiritual en los lugares celestes, que Tú nos has puesto en nuestras manos toda buena dádiva y todo don perfecto, que nos has perdonado, que estás contento con nosotros, que tienes buenos planes para mí y para nuestros hijos, que no moriremos sino que viviremos, que nadie podrá hacernos frente todos los días de nuestra vida, que Tú nos has entregado toda la tierra que pisa la planta de nuestros pies, que todo lo podemos cumplir y realizar en Cristo Jesús que nos fortalece, que Tú eres nuestro sanador, el que nos da vida, el que sacia de bien nuestra boca de modo que nos rejuvenezcamos como el águila, el que sana nuestras dolencias y que perdona nuestras iniquidades.

Ayúdanos a creer estas cosas y hablarlas, y confesarlas, y ser portadores de esa Palabra redentora del Reino de Dios, gracias Padre por tu buen propósito para nosotros. Bendigo a este Señor, salgamos de aquí fortalecidos e inspirados, en el Nombre de Jesús oramos, amén y amén, Dios les bendiga mis amados hermanos.