Por tanto, dejando a un lado la falsedad, hablen verdad cada cual con su projimo, porque somos miembros los unos de los otros.
Efesios 4:25
Dios no es hombre, para que mienta, Ni hijo de hombre, para que se arrepienta. ¿Lo ha dicho El, y no lo hará? ¿Ha hablado, y no lo cumplirá?
Números 23:19