Bendice, alma mía, al SEÑOR, y bendiga todo mi ser su santo nombre.
Psalm 103,1
Cuando ya se acercaba, junto a la bajada del Monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, regocijándose, comenzó a alabar a Dios a gran voz por todas las maravillas que habían visto.
Lucas 19:37